Por Inmaculada Sanz
MADRID (Reuters) - El Partido Popular trató de minimizar el viernes el riesgo de que su socio de investidura retire el apoyo al Gobierno conservador si éste no cumple con su promesa de sustituir en sus cargos a políticos imputados por corrupción.
Tras romper Ciudadanos un pacto de gobierno en Murcia por la negativa del presidente, Pedro Antonio Sánchez, del PP, a dejar el cargo pese a estar investigado por corrupción, las dudas se centran ahora en si el joven partido que ha hecho de la regeneración su lema se planteará dejar de seguir apoyando al Ejecutivo nacional.
"No dudamos de la solidez y la lealtad de Ciudadanos", dijo el ministro portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
El Ejecutivo y el Partido Popular apelan a la "responsabilidad" del partido encabezado por Albert Rivera, aduciendo que el acuerdo preinvestidura de seis medidas recogía la destitución de un cargo público cuando hubiera una acusación formal, cosa que alegan que aún no ocurre en Murcia.
"Creo que la sangre no va a llegar al río. Estoy convencido de que seremos capaces de reconducir la situación", dijo el vicepresidente general de organización del PP, Fernando Martínez-Maíllo, en una entrevista en Onda Cero el viernes.
El PP insistió en distinguir ese pacto de las 150 medidas económicas y sociales acordadas con Ciudadanos para propiciar el segundo mandato de Mariano Rajoy tras dos elecciones no concluyentes que dejaron al país sin gobierno durante diez meses.
"Llevamos cuatro meses de gobierno y el acuerdo es para una legislatura de cuatro años, hay mucho tiempo para llevar a cabo esos acuerdos", dijo por otra parte Méndez de Vigo, insistiendo en las "fluidas" relaciones con su "principal socio".
"EL PP NO TIENE CREDIBILIDAD"
Pese a que Rivera coincidió en la buena marcha del acuerdo de investidura en temas que no sean la corrupción, reprochó al partido en el Gobierno su negativa a impulsar la regeneración política pese al daño que le han hecho en las urnas los temas de corrupción.
"Allí donde no hay corrupción, el pacto avanza", se escudó Rivera en una entrevista en La Sexta cuando fue preguntado por un eventual impacto en la relación con el PP a nivel nacional.
Mientras el PP cierra la puerta a destituir a su presidente en Murcia, el líder de Ciudadanos ha planteado contactos con el Partido Socialista y Podemos para impulsar en el Congreso el fin de los aforamientos y la limitación de mandatos.
Además, Rivera preguntará a Rajoy la próxima semana por su negativa a que se abra una comisión parlamentaria sobre la presunta financiación irregular del PP, un asunto judicializado que el partido en el poder ha rechazado por el momento que se aborde en la cámara baja.
En Murcia, donde el PP gobierna con el apoyo de Ciudadanos al quedarse a un escaño de la mayoría absoluta en 2015, el partido naranja dice que estudia una moción de censura que exigiría del apoyo del PSOE, segunda fuerza regional, y de Podemos.
"Si tiene valor Rivera, que plantee una moción de censura", dijo el presidente murciano en rueda de prensa el viernes.
Sánchez presume de contar con el apoyo del Partido Popular, que al igual que él pide que se le deje explicarse en la declaración el próximo lunes ante el juez, que ve indicios contra él de fraude y malversación de caudales públicos.
"Dentro de 72 horas podré aclarar ante el juez que no me he llevado ni un euro (..) ¿Hay que liar la que han liado? ¿A quién beneficia?", dijo Sánchez.