Por Barbara Lewis y Lisa Keddie
LONDRES (Reuters) - La comedia británica "Only Fools and Horses" se emitió durante décadas, atrajo a la audiencia doméstica más grande hasta ahora para un episodio de televisión y ha batido récords de taquilla con una versión musical del West End que resuena en una nación dividida por el Brexit y el recuerdo de tiempos más sencillos.
Mucho ha cambiado en Reino Unido desde que Derek "Del Boy" Trotter y su hermano menor Rodney se ganaban la vida en las décadas de 1980 y 1990 en las calles de Peckham, en el sureste de Londres, vendiendo cualquier producto dudoso que llegara a sus manos.
"Estamos en una situación increíblemente polarizada, por lo que a veces es muy agradable regresar y mirar las cosas con gafas de rosa", dijo a Reuters Tom Bennett, quien interpreta a Del Boy en el musical.
"De manera simplista, se podría decir que fueron tiempos más simples, mucho mejores. Este no es el caso en absoluto. Pero es divertido. Es un musical. Está basado en una de las mejores comedias jamás escritas", agregó.
El original era una creación de John Sullivan, cuya capacidad para retratar a desvalidos adorables se basaba en su experiencia de crecer en una familia de clase trabajadora en el sur de Londres. Tomó un trabajo tras bambalinas en la BBC y logró que prestaran atención a sus guiones tras años de rechazos.
En 1996, un episodio de "Only Fools and Horses" atrajo a una audiencia televisiva británica récord de más de 24 millones y, para cuando murió en 2011, el humor británico por excelencia de Sullivan había desatado risas en todo el mundo.
Los actuales residentes de Peckham se encuentran entre los que más asisten al Theatre Royal Haymarket, uno de los teatros más antiguos del West End.
El musical es obra del hijo de Sullivan, Jim, quien se unió al actor y escritor Paul Whitehouse, y desarrolló las ideas que dejó su padre.
(Información de Barbara Lewis. Editado en español por Lucila Sigal)