MADRID (Reuters) - El reelecto secretario general socialista, Pedro Sánchez, mostró el lunes su apoyo al Gobierno de Mariano Rajoy en su rechazo frontal a la celebración de un referéndum independentista en Cataluña, cuya fecha se conocerá en los próximos días.
Sánchez trasladó por teléfono al presidente del Ejecutivo su oposición a "una consulta soberanista que vaya en contra de la Constitución", según Moncloa y el entorno del nuevo dirigente socialista, partidario de una reforma constitucional que permita albergar una "España plurinacional".
El apoyo de la principal formación de la oposición al Gobierno del Partido Popular llega horas antes de una reunión de las fuerzas independentistas catalanas, en la que, entre otras cosas, se debatirá la pregunta y la fecha para la votación.
Cataluña, que representa una quinta parte de la economía española, alberga un nutrido movimiento independentista que creció durante los años de crisis económica bajo la premisa de que la región aportaba al Estado español más de lo que recibía a cambio.
Ante la cercanía de la hipotética consulta, el Gobierno conservador ha redoblado sus mensajes sobre la inviabilidad de un referéndum que, según el sondeo oficial de la Generalitat de Cataluña, quieren celebrar la mayoría de los catalanes.
"Ese referéndum de autodeterminación no tiene cabida en España (..) ni en el panorama internacional y no se va a celebrar", dijo la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en rueda de prensa en Madrid el lunes.
El gobierno catalán acusó el domingo al Ejecutivo central de "dar la espalda al 80 por ciento de la ciudadanía catalana" y dijo que en un plazo máximo de dos semanas fijarían la fecha de la consulta secesionista.
Tras animar de nuevo al presidente catalán, Carles Puigdemont, a acudir al Congreso para exponer sus demandas, Sáenz de Santamaría dijo que el Gobierno actuaría para preservar la legalidad en caso de que haya una convocatoria de referéndum, aunque no quiso decir de qué forma lo haría.
"El señor Puigdemont está buscando (..) alimentar un victimismo que ya no cuela, haremos lo que tengamos que hacer, está realmente interesado en poder decir lo que otros vamos a hacer más que en hablar y explicar las razones de su plan", dijo Sáenz de Santamaría.
La vicepresidenta afeó a Puigdemont que estuviera utilizando la consulta para reforzar las posibilidades de su partido - el PDeCat- ante unas hipotéticas elecciones autonómicas anticipadas este otoño que, según los sondeos, ganaría la formación independentista Esquerra Republicana de Catalunya.
"El clima en Catalunya es preelectoral. Se está instrumentalizando un proceso en el que se ha metido el Govern y que no tiene salida. Y lo hace porque está pendiente de las encuestas. Hay más táctica electoral que estrategia por parte del presidente de la Generalitat", dijo Sáenz de Santamaría.
Pese a que la mayoría de los catalanes quieren expresar su opinión, el apoyo a la independencia ha caído en los últimos meses, rechazándola un 48,5 por ciento de la ciudadanía catalana, según un sondeo oficial de la Generalitat publicado en marzo, frente a un 45,1 por ciento que eran contrarios tres meses antes.