Por Stephanie van den Berg
LA HAYA (Reuters) - El Parlamento holandés aprobó el jueves una moción que reconoce como genocidio la matanza de hasta 1,5 millones de armenios en 1915, aunque el Gobierno dijo que esto no se convertiría en una política oficial de los Países Bajos.
La medida, a la que se opusieron sólo tres legisladores de un total de 150, corre el riesgo de tensar aún más las relaciones diplomáticas entre La Haya y Ankara, que han sido tirantes desde que Holanda le prohibió a un ministro turco realizar campaña en su territorio el año pasado.
Turquía niega que la matanza, que ocurrió en el momento álgido de la Primera Guerra Mundial, constituya genocidio. "El Gobierno no seguirá el juicio del Parlamento", dijo la ministra de Asuntos Exteriores, Sigrid Kaag, a la televisión holandesa antes de la votación. Además instó a una "extrema precaución cuando se aplica el término genocidio a eventos pasados".
"Este gabinete quiere tener mucho cuidado con las relaciones con Turquía, que han estado mejorando", destacó.
Las relaciones entre los dos países, ambos miembros de la OTAN, se congelaron el año pasado cuando los Países Bajos deportaron a un ministro que había ido a hacer campaña entre la minoría turca holandesa para un referéndum constitucional en Turquía.
Turquía convocó al encargado de negocios holandés a Ankara el sábado para expresar su descontento con la inminente votación sobre Armenia. Casi una docena de otros países de la Unión Europea han aprobado resoluciones similares.
La mayoría de expertos fuera de Turquía considera que la matanza fue un genocidio, es decir, un intento por destruir a un pueblo entero en parte o en su totalidad.
Turquía acepta que muchos armenios cristianos que vivían en el Imperio Otomano fueron asesinados durante la Primera Guerra Mundial, pero impugna las cifras y niega que hayan sido sistemáticamente orquestados o constituyan un genocidio.