Por Brian Homewood
GINEBRA (Reuters) - Varias selecciones de fútbol tuvieron que jugar encuentros difíciles si no siguieron la línea política dentro del órgano rector del fútbol mundial, según declaraciones el jueves del candidato jordano a la presidencia de la FIFA.
El príncipe Ali Bin el Hussein, uno de los cinco hombres que compiten para ocupar el cargo de jefe de la FIFA, habló de la existencia de un clima de miedo y represalias dentro de la organización, plagada de escándalos, cuyo presidente saliente, Joseph Blatter, fue cesado de su cargo en octubre y suspendido por ocho años en diciembre.
"Déjeme decirle lo que ocurre cuando no estás a favor de los poderes reconocidos de la FIFA", dijo en una rueda de prensa el príncipe Alí, presidente de la asociación de fútbol de Jordania.
"Los proyectos de desarrollo se paran misteriosamente; las ofertas de torneos se ven comprometidas o se retiran; equipos nacionales comienzan a hacer frente a encuentros o incluso árbitros menos favorables", añadió.
"Todas estas maniobras son instrumentos efectivos para castigar a las asociaciones que no demuestran lealtad política".
La FIFA está sumida en la peor crisis de sus 111 año de historia, con investigaciones abiertas sobre corrupción en Suiza y Estados Unidos. Varias decenas de personas han sido imputadas, entre ellas, altos cargos de la organización.
Al príncipe Alí no se considera como favorito en las elecciones de la FIFA del próximo 26 de febrero para encontrar el sucesor de Blatter, que ha presidido la organización desde 1998.