Por Marek Strzelecki y Alan Charlish
VARSOVIA, 12 feb (Reuters) - El primer ministro polaco, Donald Tusk, viajó el lunes a Francia y Alemania, mientras los tres miembros de la Unión Europea tratan de estrechar lazos ante los crecientes riesgos de seguridad.
Con la guerra en Ucrania a punto de entrar en su tercer año y una posible presidencia de Donald Trump poniendo en entredicho el compromiso de Estados Unidos con la alianza militar de la OTAN, Varsovia, París y Berlín consideran esencial la unidad en materia de defensa.
"Europa tiene que ponerse las pilas (...) se trata de responder a una pregunta sobre qué pasará si gana Trump. No tenemos tiempo, nuestra industria de defensa debe tener una mayor capacidad", dijo una fuente del Gobierno polaco.
La fuente añadió que Europa necesita urgentemente la producción conjunta de municiones y que Polonia ya no bloquea la "autonomía estratégica": hacer que Europa dependa menos de los demás.
El cambio se ha notado en otros lugares de Europa.
"Ahora, por primera vez, un Gobierno polaco dice que reforzar el área de Capacidades Europeas de Seguridad y Defensa no está reñido con una OTAN fuerte", explicó Dietmar Nietan, alto cargo alemán encargado de la cooperación con Polonia.
Las relaciones entre Polonia y Alemania se tensaron tras ocho años de gobierno ultranacionalista en Varsovia. En la campaña para las elecciones de octubre, el partido Ley y Justicia (PiS, por sus siglas en polaco), en el poder de 2015 a 2023, acusó a Berlín de ser el villano en todos los ámbitos, desde la inmigración hasta la energía.
Sin embargo, según los analistas, el regreso de Tusk, expresidente del Consejo Europeo, al cargo de primer ministro facilita la revitalización de la plataforma del "Triángulo de Weimar" para impulsar la cooperación política entre Alemania, Francia y Polonia, creada en 1991.
PREOCUPACIONES DE EUROPA DEL ESTE
Una segunda fuente del Gobierno polaco dijo que el formato daba a Varsovia una forma de presentar las preocupaciones de los miembros del este de la UE. "Primero hablamos con nuestros vecinos, entendemos sus preocupaciones y luego podemos formularlas en nombre de la región a nuestros colegas alemanes y franceses", dijo la fuente.
Además de las conversaciones de Tusk con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz, los ministros de Asuntos Exteriores se reunirán en París el lunes.
Una fuente diplomática francesa dijo que inyectar nueva energía al proyecto europeo era necesario en un año electoral importante para Europa y Estados Unidos.
Según la fuente francesa, las conversaciones se centrarán en cuestiones que van desde la lucha contra la desinformación rusa y la ayuda a Ucrania hasta el fortalecimiento de la industria europea de defensa.
Un tema delicado es la cuestión de las reparaciones alemanas por las pérdidas sufridas por Polonia en la Segunda Guerra Mundial.
El PiS exigió 6,2 billones de eslotis (1,55 billones de dólares) en reparaciones, pero fue rechazado por Berlín. La nueva administración polaca ha adoptado un enfoque diferente y el ministro de Asuntos Exteriores, Radoslaw Sikorski, ha afirmado que Alemania debería pensar de forma "creativa" sobre la cuestión.
"La única forma posible de resolver la cuestión de las reparaciones es convirtiéndola en un debate sobre seguridad y defensa", dijo Piotr Buras, investigador del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.
"Las inversiones alemanas en defensa, incluidas aquellas para reforzar la seguridad de Polonia, serían una respuesta con visión de futuro".
(1 dólar estadounidense = 4,0093 eslotis)
(Información de Marek Strzelecki y Alan Charlish en Varsovia, Sarah Marsh en Berlín, John Irish en París; editado por Andrew Cawthorne; editado en español por Javi West Larrañaga)