BAGDAD (Reuters) - El principal clérigo iraquí pidió el viernes de nuevo a sus compatriotas que se unan contra el "gran peligro" que suponen los insurgentes del Estado Islámico, cuyos avances han provocado que el presidente Barack Obama autorice ataques aéreos.
En su sermón semanal de los viernes a través de un portavoz en la ciudad sagrada chií de Kerbala, el gran ayatolá Ali al Sistani acusó a los políticos iraquíes de la mayor crisis del país desde la caída de Sadam Husein en 2003, diciendo que están motivados por intereses propios.
"Todos los iraquíes deberían unir fuerzas e intensificar los esfuerzos ante este gran peligro que amenaza a su presente y su futuro", dijo Sistani.
El Estado Islámico, una segregación de Al Qaeda, se hizo con el control del norte de Irak en junio, casi sin oposición por las fuerzas iraquíes, entrenadas y fundadas por Estados Unidos, y desde entonces ha seguido ampliando su control.
Con el sermón del viernes, es la segunda vez que Sistani pide a los iraquíes rebelarse contra el grupo islamista, que ha amenazado con marchar sobre Bagdad y quiere cambiar el mapa de Oriente Próximo imponiendo su ideología radical.
Sistani dijo que los políticos que se aferran a su cargo cometen un "grave error", añadiendo presión al primer ministro chií Nuri al Maliki para que abandone sus intenciones de un tercer mandato.
Sistani instó a los políticos a elegir a un primer ministro que pueda unir a los iraquíes y acabar con la crisis de los insurgentes suníes.