Por Liam Proud
LONDRES (Reuters Breakingviews) - Spotify (NYSE:SPOT) le dio a los deprimidos directivos de la industria musical algo sobre lo que cantar de alegría. El popular servicio de música en 'streaming' mostró a los sellos cómo ganar dinero vendiendo canciones a través de Internet. Los inversores cuentan con que los intermediarios musicales le devuelvan ahora el favor. Aunque quizá sea algo prematuro.
La empresa sueca, valorada en 33.000 millones de dólares, está creciendo rápidamente. Tiene más de 80 millones de suscriptores de pago, más que Apple (NASDAQ:AAPL) Music. Los ingresos aumentarán un 30 por ciento este año, hasta 6.100 millones de dólares, según estimaciones de Thomson Reuters I/B/E/S. No es de extrañar que las acciones hayan subido un 39 por ciento desde que salieron a bolsa en abril.
Los inversores han quitado hierro a las fuertes pérdidas de Spotify, que superaron los 1.400 de dólares millones el año pasado, y los limitados márgenes de beneficio. Los pagos a proveedores, incluidos los sellos Universal, Sony (T:6758) y Warner, consumen tres cuartas partes de los ingresos, dejando un margen bruto del 25 por ciento. El fundador Daniel Ek espera que eventualmente Spotify pueda pagar "royalties" más bajos a medida que su tamaño le dé más poder de negociación con los intermediarios.
La ambición de Ek es aumentar los ingresos hasta en un 35 por ciento al año y que solo el 65 por ciento de esa facturación vaya a parar a los proveedores. Eso implicaría 27.000 millones de dólares en ingresos en 2023 y un beneficio operativo de 2.200 millones dólares. Si se multiplica por 20 veces el beneficio operativo, la media a la que cotizan Google (NASDAQ:GOOGL), Facebook (NASDAQ:FB) y Twitter, el grupo valdría en bolsa 43.900 millones de dólares. Restemos 6.200 mil millones de dólares en flujo de caja libre hasta 2023, descontemos un 8 por ciento a todo, y Spotify debería valer 34.000 millones en la actualidad. Dado que esa cifra está cerca de su valor de mercado, los inversores parecen pensar que Ek alcanzará sus ambiciosos objetivos.
¿Tocarán la misma melodía los sellos musicales? No tuvieron problema en recortar los royalties el año pasado, pero lo cierto es que entonces tenían una una mayor participación en el capital de Spotify. Desde abril, Warner y Sony han vendido acciones.
Es verdad que Universal, Sony, Warner y la red independiente Merlin (MC:MRL) tienen interés en mantener vivo a Spotify. No quieren que reduzcan su negocio otras plataformas de música como Apple y Amazon (NASDAQ:AMZN). Pero tampoco quieren un Spotify demasiado poderoso. La empresa ya está desarrollando relaciones directas con artistas, lo que podría eliminar a los intermediarios.
De momento, los sellos tienen un as en la manga. Sus músicos representaron casi nueve de 10 reproducciones de Spotify el año pasado, según calcula JPMorgan (NYSE:JPM), mientras que Spotify representó solo una quinta parte de los ingresos de las discográficas, dice Deutsche Bank (DE:DBKGn). Si Spotify se vuelve demasiado caprichoso, tienen la opción nuclear de retirar su música. Eso haría que los accionistas de Ek cantaran un blues muy triste.
(El autor es un columnista de Reuters Breakingviews. Las opiniones expresadas son personales.)