TRÉVERIS, Alemania (Reuters) - Una enorme estatua del padre fundador del comunismo fue erigida en su lugar de nacimiento, después de que la ciudad alemana de Tréveris decidiera aceptar la escultura de bronce de China, a pesar de las preocupaciones sobre el historial de derechos humanos del país.
La estatua de tres toneladas de Carlos Marx fue erigida antes del 200 aniversario del nacimiento del influyente pensador y filósofo el 5 de mayo, cuando será mostrada al público.
"Carlos Marx es el hijo más famoso de Trier", dijo el viernes a Reuters el responsable municipal Andreas Ludwig.
La estatua representa a un pensativo pero imponente Marx, que se yergue a más de 5 metros de altura, incluyendo su base, mientras sostiene un libro en una mano. El pensador del siglo XIX pasó los primeros 17 años de su vida en Tréveris, cerca de la frontera con Luxemburgo.
El ayuntamiento votó a favor de aceptar el regalo del Gobierno chino por 42 votos a favor frente a 7 en contra en marzo de 2017, pero la estatua genera división de opiniones.
Algunos lo ven como un reconocimiento al más famoso residente de Tréveris.
"La gente, por lo general, ha acogido el regalo de buen grado", dijo Michael Thielen, un imitador de Karl Marx en el lugar.
A otros les preocupa que aceptar el regalo de China no sea compatible con criticar los abusos de derechos humanos del país.
China fue criticada en marzo por expertos en derechos de la ONU por la detención del abogado de derechos humanos Jiang Tianyong, desaparecido en noviembre de 2016 y al que se cree retenido en secreto.
Desde 2015, el presidente de China, Xi Jinping, ha presidido una represión generalizada contra los activistas de derechos humanos, que han visto a numerosos abogados como Tianyong arrestados y con largas condenas de prisión.
El artista chino que diseñó la estatua, Wu Weishan, había sugerido que debía colocarse en la Porta Nigra, un icónico lugar de Tréveris y una de las mayores puertas romanas al norte de los Alpes. La estatua se erigió al final en Simeonstiftsplatz, en el corazón de la ciudad del sur de Alemania.
La figura de Marx es polémica en su país, porque algunos acusan a las ideas del filósofo por el auge de dictadores comunistas, el Muro de Berlín y la subsiguiente Guerra Fría.
Dieter Dombrowski, presidente federal del Sindicato de Víctimas de Tiranía Comunista (UOKG), dijo en un comunicado: "Por las víctimas de crímenes que pueden rastrearse hasta las ideas de Carlos Marx, este acto es irrespetuoso e inhumano".