MADRID (Reuters) - La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, dijo el jueves en el juicio del caso de corrupción Gürtel que no conocía al cabecilla de la trama, Francisco Correa, y negó que otro miembro de su gobierno encausado por presuntamente cobrar comisiones fuese una persona de su confianza.
La ahora portavoz del PP en el Ayuntamiento de la capital española declaró como testigo en el juicio de uno de los escándalos de corrupción más graves que ha salpicado a varios miembros del gobernante Partido Popular desde su descubrimiento.
Aguirre dijo que "jamás" había hablado con Correa, cuyas empresas eran contratadas para organizar diversos actos del Partido Popular.
"Yo no sabía quién era el señor Correa, ni si tenía empresas, quién se encargaba de la luz, de las sillas, del sonido de los actos", dijo Aguirre en su declaración.
"Jamás he hablado con él ni le conocía", añadió ante el tribunal de la Audiencia Nacional que juzga el caso.
Aguirre también ha declarado que el exconsejero madrileño Alberto López Viejo, miembro del gobierno de Aguirre y acusado de presuntamente recibir comisiones de la trama Gürtel por adjudicaciones, no era una persona de su confianza, pero que le preguntó por la contratación de una de las empresas de Correa a raíz de un artículo en prensa.
"Llamé a López Viejo para preguntar si contratábamos con esa empresa y me dijo que al principio sí, pero que luego estábamos contratando con otras empresas (...) Lo que no me dijo es que todas las empresas pertenecían a la misma persona", dijo Aguirre.
Mientras se juzgan las actividades de la trama Gürtel en Madrid, un tribunal valenciano ya ha condenado a Correa a 13 años de cárcel por amaño de contratos públicos señalando que su grupo de empresas fue creado para manipular concursos públicos y lucrarse aplicando unos márgenes desproporcionados.