Por Tsvetelia Tsolova y Maja Zuvela
SOFÍA/RIGONCE, Eslovenia (Reuters) - Los líderes europeos cruzaron amenazas y reprimendas el sábado, mientras miles de inmigrantes y refugiados seguían acumulándose en los Balcanes, antes de un encuentro en el que la Unión Europea buscará el domingo acordar medidas urgentes para lidiar con la crisis.
La preocupación crece por los cientos de miles de inmigrantes que están llegando a Europa, muchos provenientes de zonas en guerra en Oriente Medio, a la par que aumentan los campamentos en los países del oeste de los Balcanes en medio de un clima cada vez más frío por la cercanía del invierno boreal.
Más de 680.000 inmigrantes y refugiados llegaron a Europa por mar en lo que va del año, huyendo de la guerra y la pobreza en Oriente Medio, África y Asia, según la Organización Internacional para las Migraciones.
Bulgaria, Serbia y Rumania dijeron el sábado que cerrarían sus fronteras si Alemania u otros países hacen lo mismo para detener el ingreso de inmigrantes, advirtiendo que no permitirían que la zona de los Balcanes se convierta en un "área de acumulación" de miles de personas varadas.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, convocó a los líderes de Austria, Bulgaria, Croacia, Macedonia, Alemania, Grecia, Hungría, Rumania, Serbia y Eslovenia a una minicumbre el domingo.
La finalidad de la reunión es acordar "medidas operativas comunes que puedan ser implementadas inmediatamente".
Medios alemanes reportaron que Juncker presentará un plan de 16 puntos, incluida una garantía de que no se enviarán inmigrantes de un país a otro sin un acuerdo previo.
Eslovenia, que dijo el viernes que evaluaría la colocación de una cerca en su frontera con Croacia a menos que se encuentre una solución el domingo, señaló que la UE "debe aliviar la carga de los países más expuestos" e instó a una acción del bloque para detener "los flujos descontrolados de migración en las fronteras externas de la UE".