Por Nidal al-Mughrabi y Dan Williams
GAZA/JERUSALÉN, 20 nov (Reuters) - Un primer grupo de bebés prematuros evacuados del mayor hospital de Gaza fueron trasladados el lunes a Egipto para recibir tratamiento, mientras que las autoridades sanitarias palestinas dijeron que hubo muertos en el interior de otro hospital cercado por tanques israelíes.
Se esperaba que cruzaran más de dos docenas de bebés, según la Media Luna Roja palestina y la cadena egipcia Al Qahera TV.
Los recién nacidos habían estado en el hospital Al Shifa del norte de Gaza, donde murieron varios otros por un colapso de los servicios médicos provocado en parte por los cortes de electricidad al agotarse el combustible.
Las fuerzas israelíes tomaron Al Shifa la semana pasada para buscar lo que decían que era una red de túneles de Hamás construida debajo.
Cientos de pacientes, personal médico y personas desplazadas evacuaron Al Shifa el fin de semana. Los médicos afirmaron que habían sido expulsados por las tropas e Israel dijo que las salidas habían sido voluntarias.
Imágenes en directo emitidas por Al Qahera mostraban a personal médico sacando con cuidado a bebés diminutos del interior de una ambulancia y colocándolos en incubadoras móviles, que luego eran llevadas por un aparcamiento hacia otras ambulancias.
Los bebés habían sido trasladados el domingo a un hospital de Rafah, en la frontera sur de Gaza, gobernada por Hamás, para estabilizar su estado antes de trasladarlos a Egipto.
En otro hospital, financiado por Indonesia, el Ministerio de Sanidad de Gaza dijo que al menos 12 palestinos murieron y decenas resultaron heridos por disparos contra el complejo cercado por tanques israelíes.
No hubo comentarios inmediatos del ejército israelí sobre la situación en el hospital, donde los funcionarios de salud dijeron que 700 pacientes junto con el personal estaban bajo el fuego de las fuerzas israelíes.
La agencia de noticias palestina WAFA afirmó que el centro, situado en la ciudad de Beit Lahia, al noreste de Gaza, había sido alcanzado por fuego de artillería. Las autoridades sanitarias palestinas afirmaron que se estaban realizando esfuerzos frenéticos para evacuar a los civiles.
El personal del hospital negó que haya habido militantes armados en las instalaciones. Israel afirma que sus fuerzas en Gaza están atacando "infraestructuras terroristas" y acusa a Hamás de librar la guerra detrás de escudos humanos, incluso en hospitales. El grupo islamista lo niega.
"Tuvimos información antes de que los tanques estaban asediando el Hospital Indonesio. Por desgracia (...), las comunicaciones allí están casi cortadas", dijo a Reuters Nahed Abu Taaema, director del Hospital Nasser, en la ciudad de Jan Yunis, en el sur de Gaza.
"Estamos muy preocupados por la suerte de nuestros colegas y por el destino de los heridos y pacientes, así como de las personas (desplazadas) que puedan haberse refugiado allí. No hay ambulancias que puedan llegar hasta ellos y tememos que los heridos mueran", dijo Abu Taeema.
El Ministerio de Exteriores indonesio dijo que había perdido el contacto con tres voluntarios indonesios del hospital que forman parte del grupo que creó las instalaciones en 2016 con financiación de Yakarta.
La ministra de Exteriores indonesia, Retno Marsudi, condenó lo que calificó de "ataque" de Israel contra el hospital, afirmando que viola claramente las leyes humanitarias internacionales, e instó a los países cercanos a Israel a conseguir que ponga fin a la violencia.
Como todas las demás instalaciones sanitarias de la mitad norte de Gaza, el Hospital Indonesio ha cesado en gran medida sus operaciones, pero sigue albergando a pacientes, personal y residentes desplazados.
Israel ha ordenado la evacuación completa del norte, pero aún quedan miles de civiles, muchos de los cuales buscan refugio en hospitales. El combustible y los medicamentos se han ido agotando en todo el enclave bajo el asedio israelí que dura ya seis semanas.
En el sur, donde se refugian cientos de miles de gazatíes que huyeron del norte del enclave, al menos 14 palestinos murieron en dos ataques israelíes contra viviendas en Rafah, según las autoridades sanitarias de Gaza. Israel no hizo comentarios inmediatos sobre el incidente.
COMBATES EN CAMPOS DE REFUGIADOS
Testigos también informaron de intensos combates entre hombres armados de Hamás y fuerzas israelíes que intentaban entrar en el campo de refugiados de Jabaliya, en el norte de Gaza, donde viven 100.000 personas y que, según Israel, es un importante bastión militante.
Los repetidos bombardeos israelíes sobre Jabaliya, una extensión urbana de la ciudad de Gaza que surgió de un campo de refugiados palestinos de la guerra árabe-israelí de 1948, han causado la muerte de decenas de civiles, según los médicos palestinos.
El ejército israelí emitió un comunicado con un video de ataques aéreos y tropas yendo casa por casa en Gaza, afirmando que habían matado a tres comandantes de compañías de Hamás y a un escuadrón de combatientes palestinos, sin dar lugares concretos.
A pesar de los continuos combates, funcionarios estadounidenses e israelíes afirmaron que se estaba acercando un acuerdo mediado por Qatar para liberar a algunos de los rehenes retenidos en el enclave palestino y detener temporalmente los combates para permitir la entrega de ayuda a los civiles afectados.
Unos 240 rehenes fueron secuestrados el 7 de octubre durante un mortífero ataque transfronterizo de militantes de Hamás contra Israel, que llevó a Israel a invadir el abarrotado territorio palestino para acabar con el grupo islamista tras varias guerras sin resultados desde 2007.
Alrededor de 1.200 personas, en su mayoría civiles, murieron en el asalto de Hamás, según los recuentos israelíes, el día más mortífero en los 75 años de historia de Israel.
Desde entonces, el gobierno de Hamás en Gaza ha declarado que al menos 13.000 palestinos han muerto, entre ellos al menos 5.500 niños, por los incesantes bombardeos israelíes.
Según Naciones Unidas, dos tercios de los 2,3 millones de habitantes de Gaza se han quedado sin hogar.
Otros 20.000 gazatíes, entre ellos un número cada vez mayor de niños no acompañados, viajaron el domingo del norte al sur, principalmente en carros tirados por burros, autobuses o a pie, y unos 900.000 desplazados se encuentran ahora en refugios de la ONU, informó el lunes la Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU (OCHA) en un informe actualizado.
(Contribución de Clauda Tanios en Dubai, Emma Farge en Ginebra y de las oficinas de Reuters.; Edición en español de Javier López de Lérida)