Por Andrew Mills
10 nov (Reuters) - La FIFA anunció el jueves que habrá vuelos chárter directos entre Israel y Qatar, que no tienen relaciones diplomáticas formales, durante el Mundial, lo que facilitará la asistencia de los aficionados israelíes y palestinos que cumplan los requisitos.
La FIFA dijo que negoció el acuerdo que permitirá a quienes tengan boletos para los partidos y una identificación válida de hincha de Hayya tomar vuelos desde el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv al Hamad International de Doha durante el evento.
"Con este acuerdo, israelíes y palestinos podrán volar juntos y disfrutar del fútbol juntos", dijo el presidente de la FIFA Gianni Infantino en el comunicado, que no especificó a qué palestinos, que viven en Cisjordania, Jerusalén Este y la Franja de Gaza, ocupadas por Israel, podría aplicarse la medida.
El acuerdo exige que los palestinos con localidades y la prensa "viajen en estos vuelos sin restricciones", destacó el comunicado.
El primer ministro israelí, Yair Lapid, dijo que negociaciones de varios meses condujeron a un acuerdo para abrir "una oficina israelí en Qatar para proporcionar servicios a los aficionados que vengan a la Copa del Mundo".
El acuerdo sobre los vuelos directos no cambia la postura de Qatar sobre la normalización de las relaciones con Israel, que está vinculada a la creación del Estado palestino, dijo un funcionario qatarí.
"Esto forma parte del compromiso de Qatar con los requisitos de acogida de la FIFA y no debe ser politizado", dijo el funcionario. "Gracias a este acuerdo, los palestinos podrán disfrutar ahora de la primera Copa del Mundo en el mundo árabe y musulmán".
Por lo general, quienes tienen pasaportes israelíes sólo pueden viajar a Qatar con visados especiales expedidos para encuentros deportivos o conferencias. No existen vuelos directos entre ambos países.
Al menos 8.000 palestinos y 3.900 israelíes han solicitado la tarjeta Hayya, dijo una fuente.
Emiratos Árabes Unidos y Baréin, vecinos de Qatar, establecieron lazos con Israel en virtud de pactos negociados por Estados Unidos en 2020.
(Reporte de Andrew Mills en Doha y Dan Williams en Jerusalén; escrito por Andrew Mills; editado en español por Javier Leira)