MANILA, 1 abr (Reuters) - Las respuestas de Filipinas a la conducta de China en el mar de China Meridional pasarán por reforzar sus capacidades de defensa con sus aliados y agotar todas las medidas diplomáticas para resolver las disputas, afirmó el lunes un responsable de seguridad.
El presidente Ferdinand Marcos Jr. dijo la semana pasada que Filipinas aplicaría medidas no especificadas contra los "ataques ilegales, coercitivos, agresivos y peligrosos" de los guardacostas chinos, intensificando así la escalada de la disputa en el mar de China Meridional.
"La respuesta proporcionada, deliberada y razonable de la que hablaba el presidente no solo abarcaba el aspecto de reforzar las capacidades militares y de defensa con otros aliados... sino que también habla de agotar los esfuerzos diplomáticos para resolver la cuestión", dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Jonathan Malaya, en la televisión estatal, describiendo el paquete como multidimensional.
Marcos también ordenó a su Gobierno que reforzara la coordinación en materia de seguridad marítima para hacer frente a "una serie de graves desafíos" a la integridad territorial y la paz, según una copia de la directiva hecha pública el domingo.
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino declaró el lunes que, independientemente de las políticas que adopte Filipinas, ninguna de ellas afectará a los derechos marítimos de China ni a sus reivindicaciones de soberanía.
China reclama casi todo el Mar de China Meridional como territorio propio, vigilado por una armada de buques guardacostas, a más de 1.000 kilómetros de su territorio continental.
En el último año, Filipinas y China han tenido una serie de enfrentamientos en el mar por cuestiones marítimas en litigio, coincidiendo con la intensificación de las relaciones militares de Manila con Estados Unidos, su aliado y antigua potencia colonial.
El último enfrentamiento se produjo el 24 de marzo, cuando China utilizó cañones de agua para interrumpir una misión filipina de reabastecimiento en el atolón de Ayungin para los soldados que custodiaban un buque de guerra encallado intencionadamente en un arrecife hace 25 años.
A finales de la semana pasada, los responsables de Defensa intercambiaron reproches: China dijo que Filipinas era la culpable de la ruptura de relaciones y acusó a su vecino de provocaciones, desinformación y traición.
Filipinas respondió acusando a China de paternalismo y de intimidar a los países más pequeños.
(Reporte de Karen Lema; Edición de Martin Petty; editado en español por Tomás Cobos)