BERLIN (Reuters) - Agnès Varda, la gran dama del cine francés, realizó su documental "Varda by Agnès" como una manera de despedirse de sus espectadores, aunque la directora de 90 años no descarta hacer más películas.
Horas antes de ser galardonada con un premio por su trayectoria en el Festival de Cine de Berlín, la Berlinale, la directora de "La Pointe Courte" (1955) y "Vagabond" (1985) rechazó los intentos de ser mitificada.
"No soy una leyenda, sigo viva", exclamó después de que la moderadora de la conferencia de prensa del miércoles la presentara como una figura "legendaria", considerada fundadora de la Nueva Ola francesa, uno de los movimientos más influyentes en la historia del cine.
El documental, su última creación, la muestra discutiendo su obra ante audiencias en directo, con extractos de películas anteriores como el clásico feminista "Cleo de 5 a 7" (2005) incluidos. A lo largo del filme, entrevista a actores y cineastas con los que ha colaborado.
"Estoy muy interesada en otras personas", dijo Varda, que nació en Bélgica, "y en la película se ve a muchas personas que han sido muy importantes para mí. Tengo que prepararme para despedirme y marcharme".
La película también explora su carrera posterior como artista visual, examinando varias videoinstalaciones que ahora se exhiben en el Museo de Arte Moderno de Nueva York y la Fundación Cartier en París, así como una serie de casetas que construyó utilizando celuloide que la revolución digital convirtió en objetos redundantes.
La carrera de Varda, casi contemporánea a la de gigantes como Jean-Luc Godard y François Truffaut, continúa hasta nuestros días. Cuando se le preguntó si "Varda by Agnès" era su última película, dijo que tal vez no podría trabajar a los 102 años.
"Pero hasta ahora, todo bien", aseguró.
(Información de Thomas Escritt; Editado en español por Natalia Ramos)