Por Ben Hirschler
LONDRES (Reuters) - Los científicos están dando nuevos pasos en la batalla para prevenir el VIH con pruebas a gran escala para comenzar a usar inyecciones para proteger a grupos vulnerables como hombres honosexuales o mujeres en África durante al menos dos meses.
El objetivo más adelante es producir implantes del tamaño de un palillo que contengan fármacos de liberación lenta - similar a los dispositivos contraceptivos subcutáneos - que podrían ofrecer protección durante un año.
Las empresas con productos vinculados a estos estudios son GlaxoSmithKline (LON:GSK), Gilead Sciences (NASDAQ:GILD) y Merck (NYSE:MRK).
Las iniciativas tratan de seguir la línea del éxito de la pastilla diaria Truvada de Gilead, que se ha revelado notablemente efectiva en detener la infección por VIH a través del sexo.
Los estudios clínicos muestras que la protección antes de la exposición puede reducir el riesgo de infección en más de un 90 por ciento, siempre que las personas tomen sus pastillas regularmente. El problema es que muchas no lo hacen.
Algunas mujeres en estudios en África, por ejemplo, dicen que fueron reacias a tomar pastillas de VIH en casa por temor a lo que podrían pensar sus parejas o vecinos.
La inyección en una clínica, dicen los expertos, daría más privacidad y aseguraría niveles estables del fármaco. Un implante en el brazo podría incluso combinar la contracepción y la protección al VIH a la vez.
"Cuantas más opciones haya mejor. Creo que para algunas personas las inyecciones serían geniales", dijo Jean-Michel Molina, profesor de enfermedades infecciosas en el Hospital Saint-Louis de París.
"Ahora que sabemos que los antiretrovirales tienen un gran potencial para evitar las infecciones del VIH, es el momento de evaluar otros medios para administrarlos", dijo.
Las necesidades siguen siendo urgentes. Pese a los avances en los tratamientos que han reducido las muertes por SIDA, alredor de 1,9 millones de personas siguen siendo infectadas del VIH cada año - una cifra que no se ha movido desde 2010. Las nuevas infecciones entre hombres homosexuales siguen aumentando.
El programa de la ONU sobre sida advirtió la semana pasada de que este problema amenazaba los avances en erradicar la epidemia global, mientras que la Organización Mundial de la Salud ha recomendado tratamientos preventivos para todos los grupos en riesgo de infección por VIH.