Por Parisa Hafezi
ANKARA (Reuters) - La televisión estatal iraní informó el martes que terminaron las operaciones de rescate en las zonas del país afectadas por un gran terremoto el fin de semana, que provocó al menos 530 muertes y más de 8.000 heridos, según la agencia IRNA.
El terremoto del domingo, de magnitud 7,3, afectó a aldeas y ciudades en el área montañosa de la provincia de Kermanshah, fronteriza con Irak, mientras muchas personas se encontraban durmiendo en sus hogares, y dejó a muchos supervivientes combatiendo el frío y el hambre. Al menos 14 provincias en Irán resultaron afectadas.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, llegó por la mañana al área afectada por el terremoto en Kermanshah y prometió que el Gobierno "usará todas sus capacidades para resolver los problemas lo más rápido posible".
La televisión estatal informó de que miles de personas ocupaban campamentos improvisados mientras que muchos otros pasaron una segunda noche a la intemperie por temor a más terremotos tras cerca de 193 réplicas.
La televisión local mostró imágenes de los equipos de rescate buscando frenéticamente entre los escombros de decenas de aldeas inmediatamente tras el terremoto, pero funcionarios iraníes dijeron que la probabilidad de hallar más sobrevivientes es extremadamente baja.
"Las operaciones de rescate en la provincia de Kermanshah han terminado", dijo en la televisión estatal el jefe de los Servicios Médicos de Emergencia de Irán, Pir-Hossein Kolivand.
La máxima autoridad iraní, el ayatolá Alí Jamenei, ofreció sus condolencias el lunes y llamó a agencias del Gobierno a hacer todo lo que puedan para ayudar.
Irán está situado sobre grandes fallas y ha sufrido varios terremotos devastadores en los últimos años, incluyendo uno de magnitud 6,6 en 2003 que redujo a polvo la histórica ciudad sudoriental de Bam y acabó con la vida de unas 31.000 personas.
(Escrito por Parisa Hafezi en Ankara; reporte adicional de Bozorgmehr Sharafedin en Londres. Editado en español por Patricio Abusleme)