17 feb (Reuters) - El líder supremo de Irán dijo el jueves que seguirá desarrollando su capacidad nuclear con fines pacíficos para preservar su independencia, en el contexto de las negociaciones con las potencias mundiales para reactivar un pacto nuclear de 2015.
Las conversaciones indirectas entre Teherán y Washington se celebran en Viena desde abril en un escenario de temor por los progresos nucleares de Teherán, considerados por las potencias occidentales como irreversibles a menos que se llegue a un acuerdo pronto.
Otras partes del acuerdo, del que se retiró el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en 2018, se han situado entre Irán y Estados Unidos. Varias fuentes, entre ellas responsables iraníes, dijeron a Reuters que los próximos dos días serán cruciales para determinar si se pueden cerrar las brechas.
"Tarde o temprano necesitaremos energía nuclear pacífica. Si no la perseguimos... nuestra independencia se verá perjudicada", dijo la máxima autoridad de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, en un discurso televisado, apoyando al equipo negociador de línea dura de Teherán que se encuentra en Viena.
"Los esfuerzos diplomáticos de nuestros hermanos revolucionarios para tratar de deshacerse de las sanciones también son buenos, pero la tarea principal es neutralizar las sanciones", añadió Jamenei, refiriéndose a las amplias sanciones reimpuestas por Trump, aún vigentes
Desde 2019, Teherán ha violado gradualmente los límites del antiguo acuerdo y ha ido mucho más allá, reconstruyendo las reservas de uranio enriquecido, refinándolo hasta alcanzar una mayor pureza fisionable e instalando centrifugadoras avanzadas para acelerar la producción.
El pacto de 2015 limitó el enriquecimiento de uranio de Irán para dificultar el desarrollo de material para armas nucleares, a cambio de un levantamiento de las sanciones internacionales.
Jamenei dijo que Irán nunca ha buscado armas nucleares a pesar de las acusaciones de los "enemigos" de la República Islámica.
(Escrito por Parisa Hafezi; editado por John Stonestreet y Andrew Cawthorne, traducido por Tomás Cobos)