Por Roberta Rampton y Jeff Mason
HAMBURGO (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder ruso, Vladimir Putin, se reunirán el viernes por primera vez en persona, en lo que promete ser el encuentro más esperado en el marco de una cumbre del G-20.
Trump ha dicho que quiere buscar maneras para trabajar con Putin, una meta que se hace más difícil por las diferencias sobre las acciones de Rusia en Siria y Ucrania, y las acusaciones de que Moscú intervino en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2016.
Eso significa que cada expresión facial y gesto físico será analizado tanto como cualquier palabra que ambos líderes expresen mientras el mundo evalúa como se relaciona el magnate estadounidense con el exespía ruso.
El temor en Washington es que el republicano, un novato en la política cuyo equipo sigue desarrollando su estrategia frente a Rusia, esté menos preparado que Putin, que ha lidiado con los dos últimos ocupantes de la Casa Blanca y decenas de líderes mundiales.
Mientras siguen las investigaciones sobre si hubo alguna cooperación entre la campaña presidencial de Trump y Rusia, el mandatario estadounidense ha estado bajo presión para asumir una línea dura frente al Kremlin. Moscú ha negado cualquier interferencia y Trump dice que su campaña no estuvo en connivencia con Rusia.
El jueves, Trump se ganó las alabanzas de al menos un republicano de línea dura en el Congreso tras su discurso en Varsovia, en el que instó a Rusia a poner fin a sus "actividades desestabilizadoras" y detener su apoyo a Siria e Irán.
"Este es un gran comienzo para una semana importante de la política exterior de Estados Unidos", dijo el senador republicano Lindsey Graham, que a menudo ha sido crítico con Trump en temas de seguridad.
Pero previamente, Trump declinó decir definitivamente si cree a los responsables de inteligencia estadounidenses que dijeron que Rusia intervino en las elecciones de 2016.
"Creo que fue Rusia, pero creo que fueron probablemente otras personas y/o países, y no veo nada malo con esa declaración. Nadie lo sabe realmente. Nadie lo sabe realmente con seguridad", dijo Trump en una rueda de prensa, antes de criticar al expresidente demócrata Barack Obama por no haber hecho más por evitar el hackeo.