MADRID (Reuters) - Los líderes catalanes que están siendo juzgados en el Tribunal Supremo por su papel en el intento fallido de independencia de la región en 2017 intentaron un "golpe de estado" contra España de forma deliberada, dijo el martes la Fiscalía en sus conclusiones finales.
La Fiscalía también reiteró los cargos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos contra los 12 acusados tras casi cuatro meses de juicio en un caso que ha contribuido a fracturar más el panorama político español.
"Hay que llamar a las cosas por su nombre", dijo en su alegato final Javier Zaragoza, uno de los cuatro representantes del Ministerio Fiscal en el llamado juicio del "procés".
"Lo que sucedió en Cataluña entre marzo de 2015 y octubre de 2017, ... y sobre todo en los meses de septiembre y octubre, (...) es lo que se llama ... golpe de Estado: la sustitución de un orden jurídico por otro por medios ilegales. Esto es lo que pretendían los acusados: derogar, suspender y modificar parcialmente la Constitución, y declarar la independencia de una parte del territorio nacional", dijo. "Eso es el 'procés'"
Esta tarde, presentará su informe final la Abogacía del Estado, que no ha acusado a los líderes de rebelión. La semana que viene será el turno de las defensas así como la última palabra de los acusados, cuatro de los cuales han sido elegidos diputado y un quinto senador en las recientes elecciones generales españolas.
No se prevé que se conozca la sentencia del juicio fallo hasta dentro de varios meses.
Los líderes políticos y civiles catalanes encarcelados podrían ser condenados a varios años de cárcel por organizar un referéndum secesionsista y después realizar una declaración unilateral de independencia pese a que ambos hechos fueron considerados ilegales por el Tribunal Constitucional.
Tras la declaración de independencia, el Gobierno, entonces en manos del PP, suspendió la autonomía antes de convocar elecciones en la región.
Aunque varios de los líderes independentistas fueron detenidos y llevan en prisión preventiva desde entonces, otros, entre ellos el entonces presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, huyeron del país.
En el banquillo se sientan antiguos miembros del gobierno catalán como Oriol Junqueras, que ejercía de vicepresidente, Raül Romeva, que se encargaba de asuntos exteriores, y Joaquim Form, titular de interior.
Los acusados y sus simpatizantes dicen que son presos políticos que no han cometido ninguna ilegalidad, mientras el Gobierno de Madrid dice que están siendo juzgados en cumplimiento estricto de la ley.
(Información de Paul Day, editado en español por Emma Pinedo y Jose Elías Rodríguez)