Por Joyce Lee
SEUL (Reuters) - La Fiscalía surcoreana pidió el miércoles una condena de 12 años de cárcel para el vicepresidente de Samsung Electronics (KS:005930), Jay Y. Lee, en un caso de corrupción que llevó al derrocamiento de la presidenta del país a principios de este año.
Los fiscales interpusieron su demanda en una vista para atender una apelación de Lee, después de que un tribunal inferior lo sentenciara a cinco años de cárcel por corrupción en un caso que sacudió al país.
El heredero de 49 años de uno de los mayores imperios corporativos del mundo, fue condenado por sobornar a la expresidenta Park Geun-hye. Además de Lee, en prisión desde febrero, otros cuatro exejecutivos de Samsung fueron acusados en el caso.
El tribunal inferior determinó que el soborno ayudó a Lee a fortalecer su control sobre Samsung Electronics, la joya de la corona en el conglomerado y una de las firmas tecnológicas más importantes del mundo.
"Los acusados dicen que están preocupados por el futuro del Grupo Samsung. Sin embargo, lo que realmente les preocupa es la pérdida de control de Lee y las consiguientes pérdidas económicas", dijo el fiscal especial Park Young-soo ante un tribunal repleto con unas 150 personas.
Lee, vestido con traje oscuro y camisa blanca sin corbata, negó los cargos de soborno y también las últimas alegaciones de los fiscales que sostenían que se reunió con Park a solas en cuatro ocasiones, en lugar de las tres que se habían revelado previamente.
Se espera que el tribunal falle sobre la apelación a finales de enero. Quien pierda podría llevar el caso al Tribunal Supremo, la máxima instancia de apelación en Corea del Sur.
El escándalo tuvo un papel importante en la caída de la expresidenta Park, que fue cesada en marzo después de ser acusada.
El tribunal inferior dictaminó en agosto que aunque Lee nunca pidió directamente la ayuda de Park, el hecho de que una fusión en 2015 de dos filiales de Samsung ayudara a consolidar el control de Lee sobre Samsung Electronics implicó que pidió la ayuda de la presidenta para fortalecer su control sobre la compañía.