Por Guy Faulconbridge
LONDRES (Reuters) - El último gobernador británico de Hong Kong, Chris Patten, advirtió el martes que una intervención de China en Hong Kong sería una catástrofe y que el presidente chino, Xi Jinping, debería darse cuenta de la importancia de intentar unir a la gente.
Patten dijo que era contraproducente para los chinos amenazar con "otros métodos" si las protestas no cesaban.
"Eso sería una catástrofe para China y, por supuesto, para Hong Kong", dijo Patten a la radio de la BBC. "Desde que el Presidente Xi está en el poder, se ha reprimido a la oposición y a los disidentes en todas partes, el partido lo ha controlado todo."
Hong Kong volvió al dominio chino en 1997 con la garantía de que bajo el sistema de gobierno de "un país, dos sistemas", la ciudad conservaría un alto grado de autonomía, un poder judicial independiente y libertades no permitidas en la China continental.
Las manifestaciones han sumido al territorio gobernado por China en su mayor crisis en décadas, siendo uno de los mayores desafíos para el líder chino Xi desde que llegó al poder en 2012.
Los manifestantes dicen que están luchando contra el incumplimiento del acuerdo "un país, dos sistemas".
Patten dijo que el primer ministro británico, Boris Johnson, debería pedirle al asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, que está en Londres esta semana, que consiga que Washington esté de acuerdo con que sería una "catástrofe" si China interviniera en Hong Kong.
(Información de Guy Faulconbridge; editado por Michael Holden; traducido por Laura Hijón en la redacción de Gdynia)