Por Pavel Polityuk
KIEV, 7 sep (Reuters) -El presidente Vladimir Putin dijo el miércoles que quería discutir la reapertura de un acuerdo mediado por la ONU que permite a Ucrania exportar su grano a través del mar Negro, tras acusar a Kiev y a Occidente de utilizarlo para engañar a los países en desarrollo y a Rusia.
Las críticas de Putin, que alegó que el acuerdo estaba entregando grano, fertilizantes y otros productos alimenticios a la Unión Europea y a Turquía a expensas de los países pobres, probablemente aumenten los temores de que el pacto pueda deshacerse si no se puede renegociar con éxito.
Ucrania, cuyos puertos han sido bloqueados por Rusia desde que la invadió en febrero, dijo que los términos del acuerdo se estaban cumpliendo estrictamente y que no había motivos para renegociarlo.
El acuerdo, facilitado por las Naciones Unidas y Turquía en julio, creó un corredor de exportación protegido a través del mar Negro para el grano ucraniano después que Kiev perdiera el acceso a su principal ruta de exportación cuando Rusia atacó a Ucrania por tierra, aire y mar.
El acuerdo, diseñado para ayudar a aliviar los precios mundiales de los alimentos aumentando el suministro de grano y semillas oleaginosas, ha sido el único avance diplomático entre Moscú y Kiev en más de seis meses de guerra.
Moscú dijo entonces que una de las principales razones por las que había firmado el acuerdo era porque quería ayudar a los países en desarrollo a evitar la escasez de alimentos.
Pero Putin dijo el miércoles que Ucrania y Occidente no estaban cumpliendo sus condiciones y que la mayor parte del grano iba a la UE, no a los países más pobres, algo que el líder ruso dijo que tendría que cambiar si se quería evitar lo que llamó una "catástrofe humanitaria sin precedentes".
"Me reuní con los líderes de la Unión Africana, con los líderes de los países africanos, y les prometí que haríamos todo lo posible para garantizar sus intereses y facilitar la exportación del grano ucraniano", dijo Putin en un foro económico en la región rusa del Extremo Oriente.
Pero si se excluyen los envíos a Turquía, como país intermediario, dijo que sólo dos de los 87 envíos se han acogido al Programa Mundial de Alimentos de la ONU, lo que representa sólo 60.000 toneladas, o el 3% del total de 2 millones de toneladas exportadas hasta ahora.
"Estamos cumpliendo los acuerdos. (Pero) resulta (...) que ellos (Occidente) nos la han jugado y no sólo a nosotros, sino a los países más pobres, cuyos intereses fueron el pretexto para hacer todo esto".
Había unos 70 barcos varados en Ucrania cuando Rusia invadió el país en febrero, algunos de los cuales ya habían sido cargados con grano, con contratos ya firmados. Algunos de esos cargamentos contratados han sido los primeros en moverse.
Putin habló de la posibilidad de restringir las exportaciones de grano y alimentos a la UE y prometió discutir el asunto con el presidente turco, Tayyip Erdogan, quien ayudó a negociar el acuerdo original.
OTRAS QUEJAS
Un asesor presidencial ucraniano respondió diciendo que Rusia no tenía motivos para revisar el histórico pacto y que los términos del acuerdo de guerra se estaban cumpliendo estrictamente.
"Creo que estas declaraciones inesperadas e infundadas indican más bien un intento de encontrar nuevos temas de conversación agresivos para influir en la opinión pública mundial y, sobre todo, para presionar a Naciones Unidas", dijo Mijailo Podolyak, el asesor.
Ucrania espera exportar 60 millones de toneladas de grano en ocho o nueve meses, dijo en julio el asesor económico presidencial Oleh Ustenko, quien advirtió que esas exportaciones podrían tardar hasta 24 meses si los puertos no funcionan correctamente.
Según Naciones Unidas, hasta ahora han zarpado o deben zarpar de Ucrania 88 barcos en el marco del acuerdo y, de ellos, dos han sido barcos del Programa Mundial de Alimentos, uno de los cuales se dirigió a Yibuti y el otro a Yemen.
De esos 88 barcos, la mayor parte del grano —368.407 toneladas— ha ido o debe ir a Turquía. En la lista se indica que alrededor de 757.697 toneladas en total se destinaron a miembros de la Unión Europea, aunque algunos envíos también van a otros países como China, India, Irán, Egipto y Sudán.
Putin se quejó de que otra parte del acuerdo destinada a aliviar las restricciones para los exportadores y expedidores de alimentos rusos tampoco se estaba aplicando.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, también puso en duda el acuerdo un día antes, acusando a los Estados occidentales de no cumplir sus compromisos recíprocos de facilitar los envíos de Moscú.
¿ÉXITO DE UCRANIA EN EL CAMPO DE BATALLA?
Mientras tanto, responsables ucranianos se mostraron cautelosos en cuanto a los resultados de la contraofensiva en el campo de batalla.
El gobernador de la región de Luhansk, Serhi Gaidai, dijo a la televisión ucraniana, sin ofrecer detalles, que "el contraataque está en marcha y (...) nuestras fuerzas están teniendo cierto éxito. Dejémoslo así".
Sin embargo, un responsable de la República Popular de Donetsk, partidaria de Moscú, ofreció el martes más detalles y dijo que había combates en Balakliya, una ciudad oriental de 27.000 habitantes situada entre Járkov e Izium, controlada por Rusia, una ciudad con un importante centro ferroviario utilizado por Moscú para abastecer a sus fuerzas.
"Hoy, las fuerzas armadas ucranianas, tras una prolongada preparación de artillería (...) comenzaron un ataque contra Balaklia", dijo Daniil Bezsonov en Telegram, añadiendo que si se perdía la ciudad, los soldados rusos en Izium se volverían vulnerables en su flanco noroeste.
"En este momento, Balaklia está en un cerco operativo y dentro del rango de tiro de la artillería ucraniana. Todos los accesos están cortados por el fuego".
Rusia dice haber repelido un asalto en el sur y no ha informado de pérdidas territoriales.
Reuters no ha podido verificar de forma independiente estos relatos del campo de batalla.
(Información de Reuters; escrito por Simon Cameron-Moore; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)