Por Maggie Fick
SOLAI, Kenia (Reuters) - La presa en una granja comercial en Kenia que estalló esta semana, matando al menos a 45 personas, fue construida de manera ilegal, dijo el viernes el regulador de recursos hidráulicos cuando la policía abrió una investigación sobre el desastre.
La presa de la granja, que cultivaba rosas para exportarlas a Europa, colapsó el miércoles por la noche después de semanas de lluvias torrenciales arrastrando el agua por una ladera que arrasó todo a su paso. Se ha informado de que hay 40 desaparecidos.
Es probable que esta catástrofe ponga el foco sobre la regulación de la industria del cultivo de flores de Kenia, que ha crecido con fuerza en los últimos veinte años para convertirse en uno de las mayores fuentes de divisas de la economía de África oriental y la mayor fuente de empleo.
Una de cada tres rosas que se venden en Europa vienen de Kenia y más de 100.000 personas trabajan en granjas de flores, y muchas de ellas están en el fértil Valle del Rift.
Elizabeth Luvonga, la portavoz de Autoridad del Control de Recursos Hídricos que supervisa las presas privadas, dijo que otros embalses de la misma propiedad en Solai, a 190 km al noroeste de Nairobi, tampoco tienen los documentos necesarios.
"Ninguno de ellos tiene los permisos. Por eso son ilegales", dijo.
Anteriormente, Vinoj Jayakumar, director general de la granja de 3.500 acres (1416,4 hectáreas) en Solai, había culpado a las lluvias torrenciales de la rotura de las paredes de barro de la presa y negó que fuera defectuosa o que careciera de los permisos necesarios.
"¿Cómo pueden decir que es ilegal? No se ha construido hoy ni ayer. Fue construida hace 20 años", declaró a Reuters.
Ante las denuncias en Kenia de que la presa no había superado los controles técnicos del gobierno, el fiscal general ordenó a la policía abrir una investigación inmediata e informar de los resultados en dos semanas.