LONDRES (Reuters) - La tripulación de un buque petrolero iraní detenido en Gibraltar está siendo interrogada como testigos, no como sospechosos de delitos, en un esfuerzo por establecer la naturaleza del cargamento y su destino final, dijo un portavoz del territorio británico.
La Marina británica interceptó el jueves el petrolero Grace 1 y lo embargaron por intentar llevar petróleo a Siria en violación de las sanciones de la Unión Europea. Aterrizaron con un helicóptero en el barco en plena oscuridad.
La medida podría intensificar la confrontación entre Irán y Occidente poco después de que Estados Unidos suspendiera un ataque aéreo minutos antes de que tuviera lugar el mes pasado. Teherán convocó al embajador británico para expresar "su firme objeción a la confiscación ilegal e inaceptable" de su barco" [nL8N2450PH].
El portavoz de Gibraltar dijo que los 28 miembros de la tripulación, que han permanecido a bordo del superpetrolero, eran principalmente indios junto con algunos paquistaníes y ucranianos. La policía y los agentes de aduanas permanecieron a bordo del buque para llevar a cabo su investigación, pero los "Royal Marines" ya no estaban presentes.
Gibraltar dijo el jueves que tenía motivos razonables para creer que el Grace 1 transportaba crudo a la refinería de Baniyas en Siria.
La Unión Europea lleva años aplicando sanciones que prohíben la venta de petróleo a Siria. Europa no tiene sanciones amplias en vigor contra Irán, pero EEUU sí, expulsando a Teherán de los principales mercados petroleros en los últimos meses y obligándole a buscar vías no convencionales para vender su petróleo.
Los datos de embarque revisados por Reuters sugieren que el petrolero transportaba petróleo iraní cargado frente a la costa de Irán, aunque sus documentos dicen que el petróleo es del vecino Irak.
La queja de Irán sobre la incautación disipó cualquier duda sobre la propiedad del buque, que está registrado como gestionado por una empresa en Singapur.
Fue confiscado en territorio británico en el extremo sur de la Península Ibérica tras navegar alrededor de África, la ruta larga desde Oriente Próximo hasta la desembocadura del Mediterráneo.
Si los funcionarios de Gibraltar no han establecido plenamente la naturaleza de la carga o el destino final, podrían en los próximos días pedir permiso a un tribunal para retener el buque durante más tiempo.
(Información de Kate Holton; Traducido por Emma Pinedo)