Por Blanca Rodríguez
MADRID (Reuters) - El líder del partido liberal Ciudadanos (C's), Albert Rivera, dijo el miércoles que las diferencias en fiscalidad eran la principal traba en sus negociaciones con los socialistas, que están tratando de formar un Gobierno presidido por Pedro Sánchez casi dos meses después de las elecciones generales en España.
Rivera dijo que esta semana era clave para que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) decida si opta por el modelo "de subidas de impuestos y referéndums separatistas" del partido antiausteridad Podemos o el de Ciudadanos "de moderación fiscal y reformas dentro de la Constitución".
"Los principales escollos que hay en la negociación son en materia fiscal", dijo en una entrevista en TVE Rivera, cuyo equipo negociador se vuelve a reunir esta tarde con el de los socialistas.
El PSOE quiere realizar una reforma fiscal que incluya la tributación de la riqueza, aunque no ha propuesto directamente una subida del IRPF, algo que defiende Podemos para los que más ingresen y que rechaza de plano C's.
Rivera recordó en cualquier caso que un acuerdo a dos no serviría para desbloquear la situación política en España, dada gran fragmentación de un Congreso de 350 diputados y la necesidad de sumar al menos una mayoría simple, en la que los "síes" superen a los "noes" a Sánchez.
Sánchez se presentará a un debate de investidura dentro de dos semanas, y si no lo supera porque ni Podemos ni Partido Popular lo faciliten, empezará a contar el plazo de dos meses para una eventual disolución de las Cortes el 3 de mayo y posterior convocatoria de nuevas elecciones a finales de junio.
PRESIÓN A PP Y PODEMOS
El acuerdo entre C's y PSOE metería en cualquier caso presión al PP, enrocado en su decisión de no abstenerse ante un Gobierno de Sánchez pero incapaz de reunir apoyos para liderar una opción alternativa, y a Podemos, que se declara incompatible con Rivera pero no quiere que Mariano Rajoy vuelva a gobernar.
"Hasta el 2-3 de mayo tenemos la oportunidad de que España tenga un Gobierno responsable, reformista y europeista, no voy a tirar la toalla", dijo Rivera, asegurando que hasta el último día había posibilidades de llegar a un acuerdo a tres con PP y PSOE.
"España lleva 30 años atrincherada en rojos y azules. Los españoles han dicho que basta de bandos, piden cambio y diálogo", dijo, añadiendo que mantendría conversaciones paralelas con el PP, que ha elaborado su propio documento para negociar un Gobierno liderado por Rajoy.
A estas mesas de negociación también se suman las que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, está impulsando para presentar su propia propuesta de Gobierno de coalición con el PSOE, que está mostrando cada vez más señales de impaciencia con el partido emergente.
TENSIÓN PSOE-PODEMOS
Después de que Iglesias dijera esta mañana que había que dejar a un lado "la prepotencia y la arrogancia" para sentarse a negociar, el portavoz socialista en el Senado, Óscar López, elevó también el tono y dijo que oír hablar al líder de Podemos de humildad era "una broma de mal gusto".
López calificó además de "involución democrática" la "obsesión" de Iglesias "por el control de la policía, de los jueces, de los fiscales, de la Televisión Española y hasta del CNI", en relación con la propuesta de Gobierno de coalición de Podemos.
El portavoz socialista dijo ahora mismo había dos bloques en la Cámara, uno formado por el PP, los partidos secesionistas catalanes DiL y ERC y el independentista vasco Bildu -que suman 142 escaños-, y otro formado por 208 diputados que votando a favor o absteniéndose podrían permitir gobernar a Sánchez.
"Pablo Iglesias tendrá que elegir si está en el bloque del cambio o está en el bloque del todo sigue igual que encabeza el señor Rajoy", dijo.
Iglesias se reunirá el jueves con Alberto Garzón, líder de Izquierda Unida (IU), que pese a tener varios puntos en común con el PSOE subrayó que no pactará nada hasta conocer los compromisos de los socialistas con otros partidos, y que negociaría la investidura, no la formación de Gobierno.