BRUSELAS, 30 ene (Reuters) -Los agricultores belgas, indignados por el aumento de los costos, las políticas medioambientales de la Unión Europea y las importaciones de alimentos baratos, planean bloquear las carreteras de acceso al puerto de contenedores de Zeebrugge, Bélgica, informó el puerto.
Los manifestantes planean impedir el acceso al puerto del Mar del Norte, el segundo mayor del país, durante al menos 36 horas a partir de las primeras horas de la tarde, dijeron los organizadores, miembros del sindicato Algemeen Boerensyndicaat (ABS, Sindicato General de Agricultores).
ABS ha hecho un llamamiento a sus miembros para que se unan a la protesta. Los organizadores afirmaron que el puerto es el objetivo porque consideran que recibe ayudas económicas a costa de los agricultores.
"Los servicios policiales han recibido información sobre una acción en el puerto de Zeebrugge", dijo un portavoz de la autoridad portuaria. No está claro en qué consistirá la acción ni cuáles serían las consecuencias.
Agregó que el puerto estaba indirectamente en contacto con los organizadores a través de la policía.
El movimiento de protesta belga se ha visto impulsado por acciones similares en Francia, donde los agricultores han levantado decenas de barricadas e interrumpido el tráfico en los alrededores de París, presionando al gobierno.
Los agricultores belgas también interrumpieron el tráfico cerca de la frontera neerlandesa en la autopista E19 el martes por la mañana.
El primer ministro belga, Alexander De Croo, se reunirá con las asociaciones de agricultores. "Es importante que se les escuche", declaró a periodistas en referencia a los retos que afrontan los agricultores.
En las últimas semanas, agricultores de toda Europa, incluidos Alemania, Polonia, Rumania y Francia, se han manifestado por lo que califican de excesiva burocracia, elevados costos del combustible y competencia desleal derivada de las políticas comerciales liberales de la Unión Europea.
Buscando una salida a la crisis, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha dicho a la Comisión Europea que era imposible concluir las negociaciones de un acuerdo comercial con el bloque Mercosur de Sudamérica.
(Reporte de Tassilo Hummel y Geert De Clercq; Editado en Español por Ricardo Figueroa y Javier Leira)