Por John Davison
AIN ISSA, SIRIA (Reuters) - Un convoy de combatientes del Estado Islámico abandonó la ciudad siria de Raqa con algunos civiles durante la noche, dijeron el domingo las milicias respaldadas por Estados Unidos que luchan contra ellos, acercando a su final la batalla por la que una vez fue la capital siria del grupo.
Había relatos contradictorios sobre si las evacuaciones incluían a combatientes tanto sirios como extranjeros y no estaba claro cuántos yihadistas seguían en la ciudad.
La caída de Raqa a manos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza de milicias kurdas y árabes respaldada por Estados Unidos, parece ahora inminente.
"Esperamos que haya difíciles combates", dijo el coronel Ryan Dillon, portavoz de la coalición internacional que respalda a las FDS en su guerra contra el Estados Islámico.
Raqa fue la primera gran ciudad siria que tomó el Estado Islámico cuando declaró su "califato" y tomó el control de amplias zonas de Siria e Irak en 2014, convirtiéndose en un centro de operaciones para realizar ataques en el extranjero y fue escenario de algunas de sus peores atrocidades.
El Estado Islámico está en repliegue desde hace dos años, cediendo territorio en ambos países y viéndose forzada a un cada vez menor bastión a lo largo del valle del río Éufrates.
"La pasada noche el último grupo de combatientes (que acordaron salir) abandonaron la ciudad", dijo Mostafa Bali, portavoz de las FDS. La batalla contra los que se quedan continúa, dijo.
Bali dijo que sólo habían salido en el convoy combatientes sirios del Estado Islámico. Pero Omar Alloush, responsable del consejo civil de Raqa creado por los aliados de las FDS para dirigir la ciudad, dijo que algunos combatientes extranjeros también habían salido.
No dijo ni cuántos fueron evacuados ni cuántos quedaban en la diminuta zona de Raqa controlada por el Estado Islámico y agujereada por las bombas. Antes de la salida del convoy, la coalición estimaba que quedaban 300-400 combatientes.