Por Jessie Pang y Sarah Wu
HONG KONG, 15 may (Reuters) - El órgano supervisor de la policía de Hong Kong pidió el viernes revisar las normas de uso de gas lacrimógeno y el entrenamiento de los agentes que controlan el orden público, en un largamente esperado informe que fue calificado como "superficial" por parlamentarios prodemocracia.
Las relaciones entre la policía y los ciudadanos se degradaron en los meses de protestas antigubernamentales, en medio de acusaciones de que los agentes usaron fuerza excesiva contra los manifestantes.
En su reporte de 999 páginas, el Consejo Independiente de Quejas Policiales (IPCC, por su sigla en inglés) estudió el comportamiento de los agentes en los meses posteriores a junio de 2019, cuando una serie de protestas a veces violentas paralizó partes de la ciudad y la hundió en su mayor crisis política en décadas.
El IPCC dijo que, aunque no abordó la responsabilidad individual de los agentes, la policía actuó dentro de las reglas, aunque hay margen para la mejora.
Asimismo, dijo que las acusaciones de brutalidad policial no deben ser usadas como un "arma de protesta política", agregando que es un "asunto legal y no político", en respuesta aparente a las peticiones de manifestantes prodemócratas de que se haga una investigación independiente.
El legislador opositor Kenneth Leung, exintegrante del IPCC, dijo que el reporte no satisface las demandas ciudadanas de una comisión independiente de investigación.
"Muchas de estas recomendaciones son incompletas, superficiales y generales", dijo Leung. "No pueden depender solo del reporte del IPCC para pretender que todos estos asuntos han sido abordados y arreglados".
"El reporte hizo caso omiso a la desproporcionada brutalidad policial", dijo el legislador prodemocracia Fernando Cheung. "Este reporte eliminó la poca credibilidad que le quedaba al IPCC".
(Información de Jessie Pang, Sarah Wu y Marius Zaharia; escrito por Anne Marie Roantree; editado en español por Carlos Serrano)