Por Jacob Gronholt-Pedersen
COPENHAGUE, 28 jun (Reuters) - El seleccionador español, Luis Enrique, alabó el carácter de sus jugadores cuando los tricampeones de Europa se recuperaron de un comienzo nefasto y dejaron escapar una ventaja de dos goles antes de vencer finalmente a Croacia (5-3) en la prórroga para alcanzar los cuartos de final de la Eurocopa 2020.
"Ha sido un partido épico. Ha tenido cosas positivas y algunas negativas, pero me quedo con la capacidad de rehacerse y de superar las dificultades de mis jugadores", dijo Luis Enrique en rueda de prensa.
"Cuando la palabra ego desaparece y aparece el equipo es lo mejor".
España se había adelantado en el marcador (3-1) después de que un increíble error del portero Unai Simón la hiciera caer en picado.
"Hemos sido superiores desde el inicio, hemos generado más y hemos tenido ocasiones claras, luego ha llegado el gol por una situación que hay que aceptar, y nos hemos quedado un poco groguis un momento. Es normal", dijo Luis Enrique.
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Croacia protagonizó una asombrosa remontada con goles en el minuto 85 y en el tiempo añadido, pero España se fue con dos goles en la prórroga.
"El partido ha sido muy comprometido emocionalmente, henos llevado el peso del partido y cuando sucede lo que nos ha sucedido hemos entrado en estado de shock. El partido se volvió loco a partir del minuto 80. Esos diez minutos son nuestra asignatura a corregir y lo hemos hecho durante el mismo partido".
"No tenemos tanta experiencia internacional en la plantilla, y quizás ese tipo de errores son inevitables".
Luis Enrique se mostró emocionado por el aprecio de los aficionados en el intenso partido de Copenhague.
"No recuerdo a dos aficiones que cinco minutos antes del final del partido se hayan levantado a aplaudir. Ha sido un partido épico, que ha tenido de todo. Cosas muy positivas y también otras negativas. Pero resalto la gran capacidad de mis jugadores para sobreponerse a las adversidades", "El titular te lo pongo yo: Enjoy football!", dijo.
(Reporte de Jacob Gronholt-Pedersen; editado por Andrew Cawthorne; traducción de Flora Gómez en la redacción de Gdansk)