Por Jill Serjeant
NUEVA YORK (Reuters) - Margaret Atwood no tuvo ningún control creativo sobre la adaptación más reciente de su novela distópica "El cuento de la criada" ("The Handmaid's Tale"), pero dejó claro que no quería "una película con pornografía no explícita".
"El tema con una sociedad tan puritana es que no se supone que el sexo sea divertido", dijo la autora canadiense a Reuters, agregando que había visto intentos por abordar su novela como "una película con pornografía no explícita, algo que siempre ha sido una tentación para cierto tipo de cineasta".
Hulu estrenará una nueva miniserie el 26 de abril, con Elisabeth Moss como la protagonista Offred. Atwood dijo que hasta ella se sorprendió de cuán escalofriante resultó la producción del libro, que ella llama una de sus novelas de "ficción especulativa".
Publicado por primera vez en 1985, "El cuento de la criada" imagina un futuro cercano en el que las mujeres fértiles son obligadas a ser esclavas sexuales en un intento por repoblar un mundo que enfrenta desastres medioambientales. Se les prohíbe leer, no pueden controlar dinero y deben vestir de forma recatada. Todos espían a todos.
Atwood, de 77 años, dijo que cada tema fue inspirado en eventos reales, aunque la premisa de "El cuento de la criada" parecía exagerada en 1985. "Hasta a mí me parecía absurda. Pero no quiero decir que fuera absurda. En ese momento no pensé que fuera a pasar", comentó.
"Cuando la gente con inclinaciones políticas dice que quiere hacer esto y aquello, siempre les creo, así que ¿por qué sorprenderse? Entonces ocurrió la elección de 2016 en Estados Unidos y todo esto se hizo más inmediato", dijo la escritora, que en la entrevista de una hora nunca mencionó a Hillary Clinton, al presidente Donald Trump o a un partido.
Si bien es considerada como una de las escritoras feministas más directas, no es una definición que Atwood elegiría. Los derechos de las mujeres y los derechos civiles están inextricablemente ligados, pero las mujeres se volvieron indiferentes en los últimos 20 años, sostuvo la autora.
"La gente ha olvidado que los derechos civiles fueron una lucha dura y que se debe de luchar por mantenerlos porque te los van a quitar si tienen la oportunidad", añadió Atwood. "Creo que generaciones enteras se criaron sin tener que luchar por esos temas y no estaban demasiado preocupadas".