BEIJING (Reuters) - China quiere poner en marcha una serie de plataformas marítimas de energía nuclear para promover el desarrollo en el mar de China Meridional, informaron de nuevo medios estatales el viernes, días después de que un tribunal internacional dictase que Beijing no tenía derechos históricos sobre la mayor parte de las aguas en disputa.
La soberanía sobre el mar del Sur de China se la disputan China, Filipinas, Vietnam, Malasia, Brunei y Taiwán, y cualquier intento de construir reactores nucleares avivará la tensión en la región.
El diario oficial China Securities Journal dijo que podrían construirse hasta 20 plaformas nucleares offshore en la región, ya que el país pretende "acelerar el desarrollo comercial" del mar de China Meridional.
"El primer reactor nuclear flotante de China será ensamblado por Bohai Heavy Industry, filial de China Shipbuilding Industry Corporation (CSIC) y la compañía construirá 20 reactores de este tipo en el futuro", dijo el diario.
"La plataforma de energía nuclear marina proporcionará energía y agua dulce a las islas Nansha", dijo, en alusión a las disputadas islas Spratly.
El periódico citó un post en una red social de China National Nuclear Corporation (CNNC), que luego fue borrado.
El Global Times, un influyente tabloide publicado por el Diario del Pueblo del Partido Comunista en el poder, anunció noticias similares en abril y dijo que las plataformas de energía nuclear podría "navegar" a zonas remotas y proporcionar un suministro estable de energía.
"La noticia es vieja", dijo a Reuters un experto de la Asociación de Energía Nuclear de China que pidió no ser identificado. "Se repite en respuesta a las últimas disputas por el mar de China Meridional".
"Se han hecho pocos progresos en la construcción de pequeño reactor de este tipo".
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino Lu Kang, preguntado en la rueda de prensa diaria, dijo que no sabía nada acerca de estos planes.
China reclama más del 85 por ciento del más de alrededor del 85 por ciento de la Mar del Sur de China fueron declarados ilegales por la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya el martes, una decisión que Pekín ha rechazado.
El martes pasado, el tribunal de arbitraje permanente de La Haya dictó que China no tiene derechos históricos sobre las aguas del mar de China Meridional, un fallo que Beijing rechaza.