MADRID (Reuters) - Cerca de 1.000 musulmanes rohingya que huyeron de la escalada de violencia en Myanmar habían sido detenidos en la frontera con Bangladesh, dijeron el sábado funcionarios de seguridad de Bangladesh, mientras se producían nuevos enfrentamientos entre insurgentes de la minoría rohingya y las fuerzas de seguridad en el estado noroccidental de Rakhine, en Myanmar.
El número de muertos por los ataques de los insurgentes rohingyas el viernes ha aumentado a 89, incluidos 77 insurgentes y 12 miembros de las fuerzas de seguridad, dijo el ejército de Myanmar.
Los ataques marcaron una escalada dramática de un conflicto que comenzó el año pasado cuando los militares lanzaron una gran ofensiva tras una serie de ataques similares. Según Naciones Unidades, los militares cometieron una serie de violaciones de los derechos humanos en esta ofensiva.
El trato los 1,1 millones de musulmanes rohingya es uno ha de los mayores desafío para el gobierno de la Premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyia .
Suu Kyi, que condenó los asaltos de 30 comisarías y de una base militar del viernes, ha sido criticado por no hablar en nombre de la minoría perseguida y por defender la brutal contraofensiva del ejército después de los ataques de octubre.
Bangladesh no acoge oficialmente a refugiados. Sin embargo. muchos de este colectivo pueden pasar la frontera y actualmente cientos de miles de rohingya viven en Bangladesh. Solo desde el pasado mes de han llegado 87.000 nuevos refugiados.
(Información de Ruma Paul y Shoon Naing, traducido por la redacción de Reuters en Madrid)