Por Alicja Ptak y Jason Hovet
PRZEMYSL, POLONIA/PRAGA, 8 mar (Reuters) - Miles de personas que huyen de los intensos combates en Ucrania llegaron el martes a Europa central y oriental, en medio de nuevos esfuerzos por crear rutas de evacuación seguras para salir de las ciudades bombardeadas por las fuerzas rusas.
Dos millones de personas -en su mayoría mujeres y niños- han huido ya de Ucrania desde el comienzo de la invasión rusa el 24 de febrero, dijo la agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR.
Con el recrudecimiento de los combates en torno a muchas de las principales ciudades ucranianas bajo los ataques de misiles y artillería rusos, las autoridades de todo el este de Europa se esfuerzan por acoger la creciente ola de refugiados.
"En lo que respecta al alojamiento, hay momentos en los que está muy saturado", dijo Witold Wolczyk, de la oficina del alcalde de Przemysl, una ciudad cercana al paso fronterizo más concurrido de Polonia que se ha convertido en un centro de tránsito para los refugiados ucranianos.
"Anoche conseguimos sacar 30 autobuses de Przemysl, que iban en distintas direcciones... Estamos intentando hacer todo lo posible para que el tráfico sea fluido", dijo.
En el paso fronterizo de Medyka, al este de Przemysl, donde los refugiados han estado llegando a pie y en coche, la fila de vehículos se extendía unos 6 kilómetros con tiempos de espera en el lado ucraniano de la frontera de 20 horas, dijeron dos mujeres a Reuters después de haber logrado cruzar.
SEGUNDA OLA
Casi dos semanas después de la invasión, el director del ACNUR advirtió de que a la oleada inicial de refugiados probablemente le seguiría una segunda oleada de personas más vulnerables, sin recursos ni conexiones.
"Será una situación más compleja de gestionar para los países europeos en el futuro, y tendrá que haber aún más solidaridad por parte de todos en Europa y fuera de ella", dijo Filippo Grandi en una conferencia de prensa en Oslo.
Los portavoces de la Unión Europea han dicho que el bloque podría ver la llegada de unos 5 millones de personas. Hasta ahora, la mayoría de los que huyen permanecen en los países fronterizos con Ucrania, encabezados por Polonia, que ha acogido a más de un millón de personas.
Tras varios intentos frustrados de crear "corredores humanitarios" para los civiles que huyen de algunos de los combates más cruentos, las autoridades ucranianas declararon que habían comenzado las evacuaciones de la ciudad asediada de Sumy, así como de la ciudad de Irpín, en las afueras de Kiev.
La indignación por el ataque de Rusia y una larga historia de relaciones tensas con Moscú han hecho que los refugiados reciban una gran cantidad de simpatía y esfuerzos de ayuda en toda Europa oriental y central.
Rusia califica sus acciones en Ucrania -que han desencadenado la peor crisis de refugiados en Europa desde la Segunda Guerra Mundial- de "operación militar especial".
Casi 300.000 personas han cruzado a Rumanía desde que comenzó la guerra, aproximadamente la mitad de ellas desde Moldavia, país no miembro de la UE, mientras que más de 140.000 habían llegado a Eslovaquia y casi 200.000 cruzaron a Hungría, según las autoridades.
Más allá de Ucrania, las autoridades dijeron que más de 100.000 personas habían ido a la República Checa, donde el centro de asistencia a los refugiados de Praga reabrió tras un cierre por exceso de capacidad el lunes, mientras que más de 43.000 habían entrado en Bulgaria.
Hasta el lunes, la ONU había confirmado la muerte de 406 civiles en Ucrania, pero dijo que la cifra real era probablemente mucho mayor, mientras que cientos de miles de personas habían quedado sin ayuda debido a los combates.
(Información adicional de Victoria Klesty en Oslo, Pawel Florkiewicz en Varsovia, Gergely Szakacs en Budapest, Luiza Ilie en Bucarest y Tsvetelia Tsolova en Sofía; redacción de Niklas Pollard, edición de Emelia Sithole-Matarise, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)