BERLÍN (Reuters) - Alemania debería aliarse con Austria e Italia en políticas de migración y seguridad, dijo el miércoles el ministro de Interior alemán Horst Seehofer, en un giro que podría resultar incómodo para la canciller Angela Merkel.
Acompañado del canciller austriaco Sebastian Kurz, Seehofer dijo que había hablado con el ministro del Interior italiano "y que este deseaba que Roma, Viena y Berlín trabajasen juntos a nivel de Interior en las áreas de seguridad, lucha contra el terrorismo y el tema capital de la inmigración".
"Lo acepté ... y lo sacaremos adelante", dijo Seehofer en una rueda de prensa en Berlín.
Kurz, que lidera una coalición de derecha en Austria, dijo: "En nuestra opinión, necesitamos un eje para la voluntad en la lucha contra la inmigración ilegal".
Estas declaraciones surgen en un momento en que la división dentro de Europa sobre cómo gestionar la inmigración se ha visto agravada con el caso Aquarius, un barco de rescate cargado de inmigrantes y operado por una ONG franco-alemana al que Italia no ha dejado atracar en sus puertos y que navega rumbo a España.
El "eje" propuesto alinearía a la Alemania de Merkel -que ha acogido a más de 1,6 millones de inmigrantes desde 2014- con el nuevo gobierno italiano y su ministro del interior, Matteo Salvini, líder del partido de ultraderecha La Liga, quien tomó la decisión de rechazar al buque humanitario.
Seehofer, del partido conservador bávaro CSU, se ha situado a sí mismo en un punto de colisión con Merkel al proponer, en el marco de un plan maestro de inmigración nacional, que Alemania debería prohibir la entrada a los inmigrantes que ya hayan sido registrados en otros países de la UE.
Esto supondría un giro en la política de inmigración de puertas abiertas adoptada por Merkel en 2015, que incrementó el apoyo al partido de ultraderecha Alternativa por Alemania y provocó grietas en el bloque de gobierno conservador de la canciller.