Por Nidal al-Mughrabi y Dan Williams
GAZA/JERUSALÉN (Reuters) - El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, presionó el viernes a los mandatarios regionales para concretar un alto el fuego en Gaza, mientras la cifra de muertos aumentaba, amenazando con extender el derramamiento de sangre israelí-palestino a la ocupada Cisjordania y a Jerusalén.
Con Israel y los milicianos de Hamás planteando términos aparentemente irreconciliables para una tregua que los mediadores esperan que comience la semana que viene coincidiendo con un festivo musulmán, Kerry presionó desde Egipto mientras sus asesores dejaron claro que su paciencia tenía un límite.
El gabinete de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu rechazó a última hora de la tarde las propuesta de un alto el fuego y está persiguiendo un cambio de planes, dijo el viernes una fuente gubernamental.
La urgencia de llegar a una tregua se aceleró con la muerte de 15 personas en un ataque a un colegio dirigido por la ONU en el norte de la Franja de Gaza, del que responsables locales culparon a un bombardeo israelí.
Israel dijo que sus fuerzas habían sido atacadas por insurgentes palestinos en la zona del colegio y que ellos habían respondido. Acusó a Hamás de impedir cualquier evacuación.
Kerry junto con sus asesores presionó desde Egipto, argumentando que la paciencia tiene un límite, frente a los planteamientos de Israel y los milicianos de Hamás aparentemente irreconciliables para llegar a una tregua que los mediadores esperan que comience la próxima semana, coincidiendo con una festividad musulmana.
Responsables en Gaza dijeron que ataques militares israelíes mataron a 33 personas el viernes, incluido el principal portavoz de la Yihad Islámica, aliada de Hamás, y a su hijo. Cifraron los palestinos muertos en 18 días de conflicto aumentaron a 822, muchos de ellos civiles.
Milicianos lanzaron cohetes desde Gaza, activando las sirenas en gran parte del sur y centro de Israel, incluido el principal aeropuerto del país. No se informó de heridos puesto que el sistema de intercepción Cúpula de Hierro pudo derribar muchos de los misiles.
El conflicto en Gaza generó tensiones en la ocupada Cisjordania, donde el presidente palestino respaldado por Estados Unidos Mahmud Abas gobierna en una difícil coordinación con Israel.
Médicos dijeron que cinco palestinos murieron en incidentes separados cerca de las ciudades de Naplusa y Hebrón, incluido un disparo que testigos dijeron que fue realizado por un colono judío.
Unos 10.000 manifestantes marcharon en solidaridad con Gaza durante la noche, a una escalada que recuerda las revueltas del pasado.
Los manifestantes se levantaron contra un puesto de control del ejército israelí, lanzando piedras y cócteles molotov, y médicos palestinos dijeron que uno murió de un disparo y 200 resultaron heridos cuando las tropas abrieron fuego.
Israel informó de que un reservista del Ejército había muerto el viernes en Gaza, elevando a 34 el número de soldados fallecidos en su ofensiva terrestre que dice que busca destruir los túneles transfronterizos usados por Hamás para amenazar sus localidades del sur y las bases del Ejército.
Tel Aviv anunció que un soldado desaparecido después de una emboscada en Gaza hace seis días estaba muerto, pero que su cuerpo no había sido recuperado. Hamás había dicho el domingo que capturó al hombre, pero no mostró ninguna fotografía.
Tres civiles han muerto en Israel por ataques con cohetes y morteros desde Gaza, la clase de incursiones que aumentaron el mes pasado, en medio del enfado de Hamás por una ofensiva contra sus activistas en Cisjordania, provocando el inicio de la intervención israelí el 8 de julio.
NEGOCIACIONES
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, convocó al gabinete de seguridad el viernes para debatir una tregua humanitaria limitada bajo la cual al movimiento palestino se le podría permitir la entrada de ayuda y recuperación de víctimas.
Un responsable palestino cercano a las negociaciones dijo que Turquía y Catar habían propuesto un alto al fuego de siete días.
Israel ha insistido en que, incluso con una tregua, su Ejército continuará destruyendo los túneles sobre la frontera de Gaza, una misión que podría demorarse entre una y dos semanas.
Netanyahu ha dicho que cualquier tregua debería llevar a una eventual retirada de los arsenales de cohetes de Gaza, algo que Hamás descarta.
El grupo palestino ha dicho que no pondrá fin a las hostilidades hasta que levante el bloqueo a Gaza y sus 1,8 millones de habitantes, y que el Estado judío libere a cientos de palestinos detenidos durante una redada en la búsqueda de tres adolescentes israelíes que posteriormente aparecieron muertos.
Más de 140.000 palestinos han sido desplazados en Gaza debido a los combates, y muchos de ellos han buscado refugio en edificios de Naciones Unidas.
Por Nidal al-Mughrabi y Dan Williams
GAZA/JERUSALÉN (Reuters) - El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, presionó el viernes a los mandatarios regionales para concretar un alto el fuego en Gaza, mientras la cifra de muertos aumentaba, amenazando con extender el derramamiento de sangre israelí-palestino a la ocupada Cisjordania y a Jerusalén.
Con Israel y los milicianos de Hamás planteando términos aparentemente irreconciliables para una tregua que los mediadores esperan que comience la semana que viene coincidiendo con un festivo musulmán, Kerry presionó desde Egipto mientras sus asesores dejaron claro que su paciencia tenía un límite.
El gabinete de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu rechazó a última hora de la tarde las propuesta de un alto el fuego y está persiguiendo un cambio de planes, dijo el viernes una fuente gubernamental.
La urgencia de llegar a una tregua se aceleró con la muerte de 15 personas en un ataque a un colegio dirigido por la ONU en el norte de la Franja de Gaza, del que responsables locales culparon a un bombardeo israelí.
Israel dijo que sus fuerzas habían sido atacadas por insurgentes palestinos en la zona del colegio y que ellos habían respondido. Acusó a Hamás de impedir cualquier evacuación.
Kerry junto con sus asesores presionó desde Egipto, argumentando que la paciencia tiene un límite, frente a los planteamientos de Israel y los milicianos de Hamás aparentemente irreconciliables para llegar a una tregua que los mediadores esperan que comience la próxima semana, coincidiendo con una festividad musulmana.
Responsables en Gaza dijeron que ataques militares israelíes mataron a 33 personas el viernes, incluido el principal portavoz de la Yihad Islámica, aliada de Hamás, y a su hijo. Cifraron los palestinos muertos en 18 días de conflicto aumentaron a 822, muchos de ellos civiles.
Milicianos lanzaron cohetes desde Gaza, activando las sirenas en gran parte del sur y centro de Israel, incluido el principal aeropuerto del país. No se informó de heridos puesto que el sistema de intercepción Cúpula de Hierro pudo derribar muchos de los misiles.
El conflicto en Gaza generó tensiones en la ocupada Cisjordania, donde el presidente palestino respaldado por Estados Unidos Mahmud Abas gobierna en una difícil coordinación con Israel.
Médicos dijeron que cinco palestinos murieron en incidentes separados cerca de las ciudades de Naplusa y Hebrón, incluido un disparo que testigos dijeron que fue realizado por un colono judío.
Unos 10.000 manifestantes marcharon en solidaridad con Gaza durante la noche, a una escalada que recuerda las revueltas del pasado.
Los manifestantes se levantaron contra un puesto de control del ejército israelí, lanzando piedras y cócteles molotov, y médicos palestinos dijeron que uno murió de un disparo y 200 resultaron heridos cuando las tropas abrieron fuego.
Israel informó de que un reservista del Ejército había muerto el viernes en Gaza, elevando a 34 el número de soldados fallecidos en su ofensiva terrestre que dice que busca destruir los túneles transfronterizos usados por Hamás para amenazar sus localidades del sur y las bases del Ejército.
Tel Aviv anunció que un soldado desaparecido después de una emboscada en Gaza hace seis días estaba muerto, pero que su cuerpo no había sido recuperado. Hamás había dicho el domingo que capturó al hombre, pero no mostró ninguna fotografía.
Tres civiles han muerto en Israel por ataques con cohetes y morteros desde Gaza, la clase de incursiones que aumentaron el mes pasado, en medio del enfado de Hamás por una ofensiva contra sus activistas en Cisjordania, provocando el inicio de la intervención israelí el 8 de julio.
NEGOCIACIONES
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, convocó al gabinete de seguridad el viernes para debatir una tregua humanitaria limitada bajo la cual al movimiento palestino se le podría permitir la entrada de ayuda y recuperación de víctimas.
Un responsable palestino cercano a las negociaciones dijo que Turquía y Catar habían propuesto un alto al fuego de siete días.
Israel ha insistido en que, incluso con una tregua, su Ejército continuará destruyendo los túneles sobre la frontera de Gaza, una misión que podría demorarse entre una y dos semanas.
Netanyahu ha dicho que cualquier tregua debería llevar a una eventual retirada de los arsenales de cohetes de Gaza, algo que Hamás descarta.
El grupo palestino ha dicho que no pondrá fin a las hostilidades hasta que levante el bloqueo a Gaza y sus 1,8 millones de habitantes, y que el Estado judío libere a cientos de palestinos detenidos durante una redada en la búsqueda de tres adolescentes israelíes que posteriormente aparecieron muertos.
Más de 140.000 palestinos han sido desplazados en Gaza debido a los combates, y muchos de ellos han buscado refugio en edificios de Naciones Unidas.