Por Stephanie van den Berg y Bart H. Meijer
LA HAYA (Reuters) - Un comandante de las fuerzas bosniocroatas en tiempos de guerra murió el miércoles tras beber lo que dijo era "veneno" segundos después de que un tribunal de apelaciones de la ONU ratificase su sentencia de 20 años por crímenes de guerra cometidos contra musulmanes bosnios, dijo la televisión estatal croata.
Slobodan Praljak, de 72 años, falleció en un hospital de La Haya tras beber de un recipiente pequeño mientras el juez leía el veredicto contra él y otros cinco sospechosos, agregó la televisión estatal citando fuentes no identificadas.
El aparente suicidio en el tribunal, cuya sesión estaba siendo retransmitida en vídeo, llegó en los últimos minutos del último juicio de la Corte Penal Internacional para la ExYugoslavia, que cierra sus puertas el mes que viene.
"Acabo de beber veneno", comentó Praljak en la corte cuando se leía su condena. "No soy un criminal de guerra. Me opongo a esta condena".
Tras beber el líquido, Paraljak se sentó y se cayó de la silla, dijo un abogado que estaba en la sala en el momento del suceso.
Responsables del tribunal de la ONU y portavoces hospitalarios holandeses declinaron hacer comentarios sobre su estado.
El general croata Marinko Kresic, que habló previamente en la televisión croata, dijo que había hablado con la esposa de otro acusado, Milivoje Petkovic, que estaba en La Haya. "Ella confirmó que bebió el veneno y que su estado de salud es muy grave", dijo.
El juez que presidía el juicio, Carmel Agius, suspendió la sesión y el personal médico llegó apresuradamente a la sala, que fue declarada escena del crimen por las autoridades holandesas. Mientras se desarrollaba la investigación forense, el tribunal fue acordonado y se pidió al público que se marchara.
"No retiren el cristal", dijo Agius, dando instrucciones a los alguaciles de bajar las persianas y tapar un cristal que separa el tribunal del público.
En los caóticos momentos que se produjeron a continuación, alguaciles y personal médico entraron y salieron apresuradamente de la sala. Se vieron ambulancias abandonando el tribunal, donde no hubo confirmación oficial del estado de Praljak.
La lectura de la sentencia se reanudó más de dos horas después de que Praljak dijera que se había autoenvenenado.
"Las autoridades holandesas ya han comenzado una investigación sobre lo sucedido esta mañana", dijo.
El incidente eclipsó la sentencia del tribunal de apelación, que era importante en Croacia, cuyo parlamento suspendió la actividad para que los diputados pudieran seguir la lectura del veredicto.
El tribunal confirmó las condenas de Praljak y otros cinco bosniocroatas: Jadranko Prlic, líder político de la provincia croata de Bosnia, y varias figuras militares y policiales: Bruno Stojic, Milivoj Petrovic, Valentin Coric y Berislav Pusic.
Los jueces confirmaron que hubo una conspiración criminal que incluyó al régimen de la vecina Croacia bajo el entonces presidente Franjo Tudjman con el objetivo de "limpiar étnicamente a la población musulmana" de partes de Bosnia para garantizar el dominio croata.
Los acusados recibieron el miércoles condenas de 10 a 25 años. La decisión no puede apelarse.