Por Julien Pretot
NUEVA YORK (Reuters) - El número uno del mundo Rafael Nadal se mostró en su mejor forma el viernes al recuperarse de un tambaleante primer set para aplastar al argentino Juan Martín del Potro 4-6 6-0 6-3 6-2 en las semifinales del U.S. Open, quedando más cerca de su decimosexto título de grand slam.
El español tuvo que luchar para manejar el servicio y la potente derecha de su oponente en el set inicial, antes de encontrar su ritmo y lograr un pase al partido por el título frente al sudafricano Kevin Anderson el domingo.
Del Potro, que había jugado un total de nueve sets en las dos rondas previas, se quedó sin energía e impotente frente al español.
Nadal selló el destino del campeón del 2009 con un espléndido revés en su primer punto de partido, cuatro años después de haber ganado su último título en Flushing Meadows.
"Ha sido una temporada increíble para mí y estoy tan feliz de tener una oportunidad de luchar por otro título después de un par de temporadas con problemas de lesiones", dijo Nadal, que batió récord al ganar su décimo Abierto de Francia en junio.
"Significa mucho para mí. Tuve que cambiar un par de cosas después del primer set porque estaba jugando demasiado a su revés y me estaba esperando ahí", agregó. "Así que traté de moverlo un poco más y ser más impredecible. No estaba jugando mal en el primer set pero lo perdí y tenía que cambiar algunas cosas".
Del Potro dominó al principio, azotando a Nadal con sus derechazos y sacando muy bien para poner al español completamente en modo defensivo.
El argentino cerró el primer set con una derecha rápida como un rayo.
La respuesta de Nadal fue devastadora, quebrando el servicio de Del Potro tres veces seguidas y concediendo sólo un error no forzado para cerrar el segundo set.
El español mantuvo la presión y con un tiro ganador en la línea logró un quiebre temprano para liderar 2-0 el tercer set.
Habiendo perdido nueve puntos consecutivos, Del Potro finalmente mantuvo el servicio para ponerse 3-1 abajo y comenzó a lanzar de nuevo derechazos. Pero Nadal mantuvo el control y selló el set con un buen remate.
Un exhausto Del Potro empezó a mandar tiros fáciles a la red y de nuevo quedó abajo cuando el español le quebró temprano el saque en el cuarto set.
Nadal, de 31 años, con sus dientes sobre la presa, mostró su nivel en el punto de partido y ahora tiene una alta probabilidad de llevarse a casa otro trofeo de grand slam.