MADRID (Reuters) - El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, insistió el sábado en que veía "mimbres" para la formación de un gobierno de fuerzas progresistas en España y pidió a Podemos que retire su veto a que el PSOE negocie con Ciudadanos.
"Hay mimbres dentro de toda esa complejidad (...) para que se pueda construir una alianza progresista de cambio que es precisamente lo que merecen y esperan los españoles de todos nosotros y de todas nosotras", dijo Sánchez en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados tras mantener una reunión con el líder del PNV.
Sánchez volvió a tender el sábado la mando al líder de Podemos, Pablo Iglesias, para negociar con la formación antiausteridad a pesar de que Iglesias había dejado el viernes más complicado el camino hacia una hipotética investidura de Sánchez al afirmar que no iniciará una negociación para formar Gobierno con él si también negociaba con Ciudadanos.
"Le estoy pidiendo a Pablo Iglesias que reconsidere su posición y que dejemos a un lado los vetos, porque son muchas más las cosas que nos unen de las que nos separan", le respondió Sánchez el sábado.
Sánchez se encuentra ahora mismo en una ronda de contactos con diferentes partidos políticos después de recibir el martes pasado el encargo del rey de formar gobierno y acabar así con el bloqueo político que vive España casi mes y medio después de la celebración de las elecciones.
Pese a tener los programas electorales más cercanos, las relaciones entre PSOE y Podemos son muy tensas, con muchos socialistas temiendo que Podemos trate de fagocitar al PSOE, lo que ha mantenido el bloqueo en sus contactos casi mes y medio después de la celebración de las elecciones.
Sánchez también avanzó el sábado que la próxima semana iba a enviar a las formaciones políticas con las que se estaba entrevistando, incluida Podemos, un documento programático, con medidas para luchar contra la desigualdad, propuestas sobre la creación de empleo, educación y sobre la reforma de la Constitución.
En las negociaciones con el PNV, su presidente Andoni Ortuzar, no descartó el sábado apoyar a Sánchez si bien se atribuyó un papel muy modesto en las negociaciones al disponer de sólo seis diputados y consideró que ahora mismo le tocaba ponerse de acuerdo a los partidos grandes.
Entretanto, el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, reiteró el sábado que su formación votaría en contra de una investidura que lidere Sánchez.
"Lo atenderemos como se merece, le voy a decir que vamos a votar que no a su candidatura", dijo Rajoy en un acto del partido en Cataluña.
La Cámara Baja cuenta con 350 diputados, de los que 90 son socialistas, mientras que Podemos y sus confluencias territoriales suman otros 69 diputados e IU dos más, frente a los 123 representantes del PP.