DUBAI, 2 feb (Reuters) -El Programa Mundial de Alimentos (PMA) declaró el viernes que está recibiendo informes de personas que mueren de inanición en Sudán.
El PMA hizo un llamamiento urgente a las partes beligerantes de Sudán, el Ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) paramilitares, para que proporcionen garantías inmediatas para la entrega sin trabas de ayuda alimentaria humanitaria a las zonas afectadas por el conflicto.
Civiles desplazados hambrientos se encuentran atrapados y sin acceso a la ayuda vital por los enfrentamientos.
Casi 18 millones de personas en Sudán padecen hambre aguda, y más de cinco millones sufren niveles de hambre de emergencia en las zonas más afectadas por el conflicto.
El PMA dijo en un comunicado que sólo pudo entregar ayuda a una de cada 10 personas en esas zonas, que incluyen la capital Jartum, la región occidental de Darfur y el estado de El Gezira, donde la RSF avanzó recientemente.
"A las agencias de ayuda les está resultando casi imposible cruzar debido a las amenazas a la seguridad, los controles forzosos de carreteras y las exigencias de tasas e impuestos", señaló el PMA.
La guerra en Sudán comenzó en abril de 2023, cuando estalló una lucha de poder entre el Ejército y la RSF por un plan de cambio hacia un gobierno civil.
Ambos bandos compartieron el poder con civiles tras el derrocamiento del ex líder Omar al-Bashir en 2019, antes de descarrilar esa transición al dar juntos un golpe de Estado en 2021. Los esfuerzos para negociar y poner fin a los combates no han dado ningún resultado hasta ahora.
El PMA dijo que está tratando de obtener garantías de seguridad para reanudar las operaciones en El Gezira, que era un centro de ayuda al que muchos habían llegado desde Jartum.
Los niveles de hambre de emergencia significan que los hogares sufren desnutrición aguda muy elevada o la muerte, o que sólo pueden hacer frente a la situación con medidas de emergencia o liquidando bienes.
(Reporte de Jana Choukeir; Editado en español por Javier Leira)