Por Marco Aquino
LIMA, 3 mar (Reuters) - En medio de la llegada a cuentagotas de las vacunas contra el COVID-19, los candidatos a la presidencia de Perú se enfrascaron en un debate frente a la posibilidad de que los privados puedan comprar las inoculaciones para sus trabajadores y sus familias.
El Gobierno del centrista Francisco Sagasti ha afirmado que el sector privado puede apoyar en el tema logístico para la aplicación de vacunas, pero no en su compra, en medio de la escasez global de las mismas y porque movería el cronograma oficial de inoculaciones en perjuicio de los más pobres.
La vacunación a tiempo se ha convertido en un tema sensible en momentos en que el país encara una segunda ola del COVID-19 y tras un escándalo de inoculaciones en secreto -y antes del plan oficial- de casi 500 privilegiados y sus familiares.
"Quieren hacer de la vacuna un negocio", acusó la candidata de izquierda Verónika Mendoza, que marcha entre los tres primeros lugares de las encuestas. "No puede saltarse la cola quien tiene billete", afirmó a la radio local RPP la postulante que compite por segunda vez por la presidencia.
Entre los candidatos que apoyan la participación de privados figuran el exarquero de fútbol George Forsyth, del conservador partido Victoria Nacional; y Yonhy Lescano del partido de centro Acción Popular. Ambos lideran los sondeos de las firmas Ipsos Perú y el Instituto Peruano de Estudios (IEP).
También Rafael López Aliaga, un ultraconservador de derecha del grupo Renovación Popular que trepó al quinto lugar en un sondeo para los comicios del 11 de abril. Asimismo la postulante de derecha Keiko Fujimori, hija del encarcelado exmandatario Alberto Fujimori que busca por tercera vez llegar al poder.
"Si hoy el Estado no las puede comprar, los privados las pueden comprar. Si somos tan ineficientes, bueno el privado lo puede hacer, pero siempre en cuando que las vacunas sean gratuitas", dijo a Reuters el candidato Forsyth sobre el tema, en una apática campaña electoral con restricciones por la pandemia.
RECLAMAN VELOCIDAD
El postulante Lescano declaró por su parte que "si las empresas compran y comienzan a vacunar a sus trabajadores a Dios gracias, estamos salvando vidas". "Y si traen para otros trabajadores, al costo, no al lucro, porque estamos emergencia, también", acotó.
La líder de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (CONFIEP), María Isabel León, se reunió el martes con Sagasti para ofrecer el apoyo logístico de los privados en el proceso de vacunación y evaluar la posibilidad de adquirir inoculaciones.
"No queremos suplantar al Estado, sino acompañarlos en la velocidad de la vacunación", dijo a periodistas la dirigente tras la cita. "El presidente nos ha asegurado que han cerrado la compra de 48 millones de vacunas, eso nos da la tranquilidad. "Vamos a esperar que cierren esas negociaciones y en el tercer trimestre ver que se pueda abrir esta posibilidad de privados".
León dijo que tienen un acercamiento con un laboratorio ruso, que permite las negociaciones no solo con los gobiernos, sino también con privados, en referencia al grupo Gamaleya.
Sagasti dijo esta semana que el gobierno estaba negociando la compra de 10 millones de vacunas Sputnik de Gamaleya. Hasta ahora, Perú tiene un acuerdo para comprar hasta 38 millones de dosis de vacunas de Sinopharm, 20 millones con Pfizer (NYSE:PFE), de 14 millones con AstraZenaca y 13,2 millones con Covax.
En la primera mitad de febrero llegó el primer millón de vacunas de Sinopharm y hasta el martes unos 300.000 trabajadores sanitarios más expuesto al virus habían sido vacunados, en medio de criticas por una lentitud en el proceso de inmunizaciones.
Los políticos populistas quieren "sacar provecho de la adquisición de vacunas", declaró el candidato centrista Julio Guzmán. "La demagogia no lleva a nada. Les exijo que no jueguen más con la desesperación de la gente", manifestó por Twitter.
(Reporte de Marco Aquino. Editado por Janisse Huambachano)