BERLÍN (Reuters) - El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, y un destacado político de Bavaria criticaron el domingo a Grecia por la forma en que está gestionando su papel en la mayor crisis migratoria que sufre Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Schaeuble, que se enfrentó en varias ocasiones este año a las autoridades griegas por sus políticas económicas, dijo al diario Bild am Sonntag que Atenas lleva años ignorando las reglas que obligan a los inmigrantes a pedir asilo en el primer país de la Unión Europea al que llegan.
Aseguró que los tribunales germanos decidieron hace un tiempo que los refugiados no están siendo tratados de forma humana en Grecia y, por tanto, no pueden ser devueltos allí.
"Los griegos no deberían culpar de sus problemas solo a otros, también deberían ver cómo pueden mejorar ellos mismos", comentó Schaeuble.
Grecia, la principal puerta de entrada a Europa para los inmigrantes que cruzan el Mar Egeo, se enfrentó a las críticas de otros gobiernos de la UE que le acusan de haber hecho poco para gestionar el flujo de cientos de miles de personas que llegan a sus costas.
Asimismo, Joachim Herrmann, ministro del Interior del sureño estado de Bavaria, que está recibiendo la mayor parte del flujo de refugiados que llegó a Alemania, criticó la forma en la que Grecia está controlando sus fronteras.
"Lo que Grecia está haciendo es una farsa", comentó Herrmann en una entrevista con el diario Die Welt am Sonntag, agregando que cualquier país que no cumpla sus obligaciones de asegurar sus fronteras exteriores debería abandonar la zona Schengen, espacio europeo en el que se han borrado los controles fronterizos internos.
Herrmann agregó que también es importante asegurar la frontera con Eslovenia para que toda la gente que entre en la zona Schengen desde Croacia pueda ser registrada de forma apropiada y detectados los terroristas potenciales. "Si no se garantiza esto en unas pocas semanas, tendremos que volvernos activos en nuestras propias fronteras", señaló.