Por Denis Pinchuk y Christine Kim
VLADIVOSTOK, Rusia/SEÚL (Reuters) - Resolver la crisis nuclear de Corea del Norte es imposible sólo con sanciones y presiones, dijo el presidente ruso, Vladimir Putin, tras reunirse el miércoles con su homólogo surcoreano, instando nuevamente al diálogo para lograr avances.
Putin se reunió con Moon Jae-in en una cumbre económica en la ciudad de Vladivostok, en el extremo oriental de Rusia, entre crecientes preocupaciones internacionales por que su vecino común planee más pruebas armamentísticas, posiblemente un lanzamiento de misiles de largo alcance antes de un importante aniversario este fin de semana.
Putin denunció el sexto y más potente ensayo de una bomba nuclear de Pyongyang el domingo, diciendo que Rusia no reconocía el estatus nuclear de Corea del Norte.
"El programa de misiles y nuclear de Pyongyang es una vulgar violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, debilita el régimen de no proliferación y crea una amenaza para la seguridad del noreste de Asia", dijo Putin en una rueda de prensa conjunta.
"Al mismo tiempo, está claro que es imposible resolver el problema de la península coreana sólo con sanciones y presiones", dijo.
El presidente ruso añadió que no se podría avanzar sin herramientas políticas y diplomáticas.
El surcoreano Moon, que llegó al poder a principios de este año abogando por un compromiso con Pyongyang, está siendo cada vez más presionado para adoptar una posición más dura con Corea del Norte.
Él y Putin "compartían la idea de que resolver la cuestión de Corea del Norte es la máxima prioridad", dijo Moon a periodistas.
Moon ha pedido a la ONU que considere nuevas sanciones contra Corea del Norte tras la última prueba nuclear. Dijo el miércoles que era inevitable que los suministros de petróleo al Norte se cortaran y pidió a Putin que cooperara.
"SUSPENSIÓN POR SUSPENSIÓN"
Las sanciones han hecho hasta ahora poco para impedir que Corea del Norte impulse su capacidad nuclear y de misiles en plena confrontación con el presidente estadounidense Donald Trump, quien ha prometido impedir que Pyongyang sea capaz de atacar el territorio continental estadounidense con un arma nuclear.
La embajadora estadounidense ante las Naciones Unidas, Nikki Haley, acusó el lunes al líder norcoreano, Kim Jong Un, de "mendigar la guerra" con los ensayos de bombas nucleares y misiles. Instó a los 15 miembros del Consejo de Seguridad a imponer las sanciones "más fuertes posibles" para disuadirlo y suspender sus alianzas comerciales.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, quien abordará el tema de Corea del Norte con Moon y Putin en Vladivostok, dijo el miércoles que quería que el Norte entendiera que "no hay un futuro brillante" si continúa en su actual camino.
China y Rusia han abogado por un plan de "suspensión por suspensión", por el que Estados Unidos y Seúl suspenderían sus ejercicios militares a cambio de que Corea del Norte detuviera sus programas armamentísticos, pero ninguna de las partes está dispuesta a ceder.
Corea del Norte dice que necesita desarrollar sus armas para defenderse de lo que ve como una agresión estadounidense.
Corea del Sur y Estados Unidos están técnicamente todavía en guerra con Corea del Norte después de que el conflicto coreano de 1950-53 terminara con una tregua, no con un tratado de paz.