Por Mark Gleeson
DOHA, 23 nov (Reuters) - Qatar, anfitrión de la Copa Mundial, sabe que no debe dejarse vencer por los nervios el viernes, cuando se enfrente al campeón africano, Senegal, con la necesidad de sacar algo de su segundo encuentro del Grupo A, o de lo contrario se verá abocado a una temprana eliminación del torneo.
El equipo local se quedó congelado bajo el peso de la presión y se puso por debajo en el marcador rápidamente ante Ecuador (2-0), ante lo cual perdió el apoyo de su propia afición, que vació el estadio en masa en la segunda parte.
"Los nervios nos traicionaron", dijo el seleccionador Félix Sánchez. "No fuimos capaces de encadenar cuatro pases seguidos. Además, muchas lagunas defensivas. El equipo no estuvo equilibrado y eso nos perjudicó mucho".
La derrota en el estadio Al Thumama de Doha haría que Qatar, campeón de Asia, se convirtiera en el segundo anfitrión de la Copa Mundial que no supera la primera ronda, después de Sudáfrica en 2010.
Sánchez, que ha tenido a sus jugadores reunidos casi como un equipo de club durante meses en la preparación del Mundial, ha prometido un equipo más "eficaz y competitivo", pero a tenor de lo visto en su primer partido, van a necesitar mucho más contra Senegal.
No pueden permitirse la fragilidad defensiva y los fallos del guardameta Saad Alsheeb que marcaron su debut en el Mundial el domingo.
Senegal dejó escapar la posibilidad de un comienzo positivo al encajar dos goles a última hora contra Países Bajos en su estreno en la fase de grupos el lunes, con el portero del Año Mundial Edouard Mendy como culpable en parte.
Es probable que el seleccionador Aliou Cissé se vea obligado a realizar cambios en la alineación inicial, después de que el centrocampista Cheikhou Kouyate tuviera que abandonar el campo por un desgarro muscular en el muslo y el defensa Abdou Diallo por una distensión en el muslo.
También es probable que haya un cambio en la delantera, donde Senegal podría empezar con un atacante más, Bamba Dieng.
"El fútbol es una cuestión de eficacia, cuando no se marca no se puede ganar", dijo Cissé, que perdió a su estrella Sadio Mané antes del comienzo del torneo.
La ausencia de Mané se notó especialmente contra Países Bajos, ya que a Senegal le faltó velocidad y determinación en el ataque.
"Trabajaremos en ello. El hecho de haber perdido el primer partido nos motivará", añadió el seleccionador.
"No todo lo que hicimos fue malo, depende de nosotros rectificar nuestros errores".
(Reporte de Mark Gleeson; editado en español por Tomás Cobos)