Por Shady Amir
17 nov (Reuters) - Qatar correrá el velo del Mundial el domingo y deberá mostrar que tiene la capacidad de organizar la competencia, luego de años de críticas y polémicas por los derechos laborales y sus estrictas leyes.
Los problemas empezaron a acumularse en diciembre de 2010, cuando se anunció que Qatar organizaría el torneo, en medio de una tormenta de críticas internacionales.
"Para mí está claro: Qatar es un error, una mala elección", dijo la semana pasada Sepp Blatter, expresidente de la FIFA.
El Mundial tuvo que cambiar de fecha, desde el clásico momento del final de la temporada, debido al abrasador verano qatarí, por lo que se jugará por primera vez a esta altura del año.
Dos estudios realizados por la FIFA en 2014 y 2015 bastaron para concluir que sería imposible celebrar el torneo en junio-julio, lo que motivó el traslado a noviembre y diciembre.
La construcción de los nuevos estadios sumó numerosas controversias en relación con los derechos laborales, en un contexto de informes de que miles de trabajadores extranjeros perdieron la vida o fueron maltratados en el proceso. Qatar respondió modificando su legislación laboral para contener la indignación de la comunidad global.
Además, las estrictas leyes islamistas contra los derechos LGBT+ o el consumo de alcohol generaron otra tormenta de críticas.
El jeque Tamim bin Hamad Al Thani, emir de Qatar, declaró ante la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre que su Gobierno estaba dispuesto a acoger a todas las personas del mundo sin discriminación, mientras que el campeón olímpico qatarí de salto de altura, Mutaz Barshim, embajador del torneo, dijo que era una oportunidad para unir a la gente.
"La Copa Mundial tendrá un impacto positivo en nuestra sociedad al mostrar nuestra cultura al mundo y ayudar a la gente a crear amistades y construir redes. Es una oportunidad de oro para cambiar las percepciones negativas sobre la región y crear nuevas y significativas conexiones", dijo en una entrevista con el sitio web de Qatar 2022 el miércoles.
Qatar será el primer equipo, desde Italia en 1934, que participará de un Mundial por primera vez como anfitrión sin haberse clasificado previamente para el torneo.
El equipo qatarí se ha sometido a un exhaustivo proceso de preparación para el torneo. Comenzó con el nombramiento del entrenador español Félix Sánchez en 2017, cuyo conocimiento de la región le ayudó a guiar a Qatar hacia el título de la Copa de Asia 2019, ganando todos los partidos en el proceso.
El equipo continuó su preparación codeándose con los mejores de Sudamérica con la participación en la Copa América 2019. Sin embargo, la experiencia resultó ser demasiado, ya que terminó último de su grupo tras las derrotas ante Colombia y Argentina y el empate ante Paraguay.
El año pasado participó en la Copa de Oro de la CONCACAF, donde demostró su mejoría al quedar primera de grupo y vencer a El Salvador en cuartos de final, antes de perder 1-0 ante Estados Unidos en semifinales.
El equipo estará bajo la presión de los aficionados para conseguir los resultados deseados en casa, sobre todo después de la decisión de la federación local de no permitir que los seleccionados jueguen con sus clubes nacionales desde el comienzo de la actual temporada para dedicarse a la preparación del Mundial.
(Editado en español por Javier Leira)