TEHERÁN (Reuters) - Reino Unido reabrió su embajada en Teherán el domingo, en una muestra más de cómo se han descongelado las relaciones de Occidente con Irán desde que grupos de manifestantes irrumpieran en el complejo diplomático hace casi cuatro años.
Unas horas después de la ceremonia en Teherán, Irán reabrió su embajada en Londres.
El secretario británico de Relaciones Exteriores, Philip Hammond, vio cómo se izaba la bandera británica en el jardín del opulento edificio del siglo XIX en la capital iraní, mientras se entonaba el himno nacional. En 2011, unos atacantes quemaron la bandera británica y saquearon la residencia del embajador.
"La ceremonia de hoy marca el final de una etapa en las relaciones entre nuestros países y el inicio de una nueva, que promete ser mejor", dijo Hammond.
El asalto provocó una crisis diplomática entre ambos países, dijo Hammond, pero las relaciones han mejorado "paulatinamente" desde la elección del presidente iraní Hasán Rohani, en 2013.
El secretario británico de Relaciones Exteriores dijo que el acuerdo nuclear que la república islámica alcanzó con seis grandes potencias mundiales el mes pasado también era un hito importante.
Hammond es el segundo secretario de Exteriores de su país que visita Irán desde la revolución islámica que en 1979 derrocó al Sha, quien era apoyado por Estados Unidos. El último había sido Jack Straw en 2003.
Hammond estuvo acompañando por un pequeño grupo de líderes empresariales, entre ellos representantes de Royal Dutch Shell, de la empresa de servicios energéticos y mineros Amec Foster Wheeler y de la firma escocesa de ingeniería industrial Weir Group (LONDON:WEIR).
(Reporte de Guy Faulconbridge. Editado en español por Rodrigo Charme)