Por Megan Cassella
(Reuters) - El precandidato presidencial republicano Marco Rubio tendrá la mirada puesta en su rival Ted Cruz en el caucus del martes en Nevada, buscando reforzar su posición como el favorito del "establishment" de su partido de cara a las elecciones del 8 de noviembre en Estados Unidos.
Las aspiraciones de ambos senadores de origen cubano están seriamente amenazadas por Donald Trump, un multimillonario empresario que ha ganado dos de los tres primeros caucus estatales y que se espera también que consiga el triunfo en Nevada.
En momentos en que algunas encuestas dan a Trump, un magnate inmobiliario que carece de una historia ligada al Partido Republicano, una ventaja de dos dígitos en Nevada, estrategas políticos del estado dijeron que Rubio y Cruz aspiran a lograr una victoria clara sobre el otro que pueda impulsar sus opciones de cara a un agitado marzo.
"Están luchando por ser segundos", dijo el analista político de Nevada Jon Ralston, que agregó: "Será un estado para Trump".
Una reciente encuesta de CNN/ORC situaba como líder destacado a Trump con 26 puntos porcentuales por encima de Rubio, senador por Florida, que contaría con unos apoyos del 19 por ciento, y Cruz, senador por Texas, un 17 por ciento.
La rivalidad entre Rubio y Cruz, quien ganó el caucus de Iowa el 1 de febrero, se ha intensificado a medida de que ambos buscan llegar bien posicionados a las primarias de una docena de estados el 1 de marzo, una jornada conocida como el "Súper Martes".
Rubio, de 44 años, logró el sábado cierto impulso al superar a Cruz, de 45 años, por menos de 1.000 votos para ubicarse segundo en las primarias republicanas de Carolina del Sur. Los analistas dijeron que el senador por Florida también se benefició del retiro de Jeb Bush, ya que algunos de sus donantes respaldarían a Rubio.
La campaña de Cruz, por su parte, sufrió un revés el lunes, cuando el precandidato despidió a su principal portavoz por la publicación de un video que mostraba una falsa burla de Rubio hacia la Biblia.