3 oct (Reuters) - Un juez italiano citó el sábado al primer ministro Giuseppe Conte y a una serie de altos cargos a declarar en el proceso en el que se acusa al líder de extrema derecha Matteo Salvini de haber retenido ilegalmente a unos inmigrantes en el mar.
La decisión de ampliar la investigación podría resultar incómoda para Conte y llega en un momento en que su Gobierno está teniendo dificultades para revisar las normas antiinmigración elaboradas por Salvini durante su breve período como ministro del Interior entre 2018 y 2019.
El caso se centra en un incidente ocurrido en julio de 2019, cuando Salvini, que entonces ocupaba la cartera de Interior, inmovilizó durante seis días a más de 100 personas a bordo de un barco de los guardacostas mientras esperaba que los aliados europeos aceptaran acogerlos.
Salvini, que encabeza el partido antiinmigración de la Liga, ha tratado de sacar el máximo provecho político de la batalla legal, diciendo que había estado actuando por el interés nacional al frenar el flujo de inmigrantes indocumentados del otro lado del Mediterráneo.
El líder de la Liga también ha dicho que todo el Gobierno apoyó su iniciativa, algo con lo que Conte ha discrepado.
Los magistrados de Sicilia han preparado el caso argumentando que Salvini secuestró a los migrantes, manteniéndolos en el mar con altas temperaturas hasta que los aliados europeos cedieron y acordaron reubicarlos. Tales cargos conllevan una pena máxima de 15 años de prisión.
La audiencia del sábado en la ciudad de Catania fue convocada para decidir si había suficientes pruebas para juzgar a Salvini. El fiscal dijo que no había y recomendó que el magistrado Nunzio Sarpietro desestimara el caso.
Sin embargo, Sarpietro decidió profundizar en él y citó a declarar a Conte el 20 de noviembre junto con el ministro de Relaciones Exteriores, Luigi Di Maio, y el ex ministro de Transportes, Danilo Toninelli, para interrogarlos sobre el asunto.
Una audiencia posterior se ha fijado para el 4 de diciembre para escuchar el testimonio a la actual ministra del Interior, Luciana Lamorgese, a la ex ministra de Defensa, Elisabetta Trenta y al embajador de Italia ante la UE, Maurizio Massari.
No hubo comentarios inmediatos del Gobierno.
Salvini dijo que estaba satisfecho con la decisión. "Estoy muy satisfecho de haber escuchando al juez que lo que se hizo no lo hice yo solo", dijo a los periodistas.
Salvini sacó a su partido de la coalición gobernante dos semanas después de la controversia sobre los inmigrantes y ahora está en la oposición.
Como ministro del Interior durante un año, durante ese tiempo Salvini centró gran parte de su energía en tratar de evitar que los migrantes cruzaran el Mediterráneo en busca de una vida mejor en Europa.
La nueva coalición está tratando de revisar las medidas que introdujo, incluida su iniciativa de aumentar las multas a los buques que forman ONG que recogen a los migrantes en el mar. Sin embargo, las conversaciones se están tambaleando, con el Partido Democrático de centro-izquierda presionando más que el Movimiento 5 Estrellas para que haya más cambios.
(Información de Crispian Balmer; editado por William Maclean y Frances Kerry; traducido por Andrea Ariet en Gdansk)