MADRID (Reuters) - El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, aseguró el lunes en una entrevista en la Cadena Ser que parte de la solución política del conflicto con Cataluña pasa por votar en referéndum una fórmula que "fortalezca" el autogobierno de la región.
Sánchez arranca así el curso político con el diálogo con el Gobierno independentista de Cataluña como primera asignatura pendiente a una semana de la fiesta más reinvidicativa por los separatistas, la del 11 de septiembre conocida como Diada.
Durante la entrevista en la radio, Sánchez aclaró que es partidario de "una votación pero no puede ser por la independencia o la autodeterminación, sino por un fortalecimiento del autogobierno de Catalunya", en referencia a volver a votar un nuevo Estatuto de Gobierno para la región.
Cataluña aprobó un Estatuto que delimitaba el autogobierno de la región en 2006 pero fue parcialmente anulado por el Tribunal Constitucional, por lo que está pendiente votar un nuevo marco que delimite la capacidad de autogobierno de la autonomía.
Sánchez reconoció que la solución está lejos de ser inmediata y será "a medio plazo" y que está en juego "la convivencia, no la independencia".
En cuanto a los Presupuestos, la clave política que puede sostener el final de la legislatura para el Gobierno minoritario de Sánchez -que llegó al poder por una moción de censura el 1 de junio-, el presidente aseguró que solo manejan el escenario de "aprobarlos", en principio durante el mes de noviembre.
El Ejecutivo ha explicado en parte sus negociaciones con Unidos Podemos, que pasan por un Impuesto a las transacciones financieras y un impuesto al diésel cuyo contenido no detalló.
El PSOE había propuesto crear un impuesto a la banca diferente al de las transacciones financieras pero Sánchez eludió aclarar si esta oferta, que puso en pie de guerra a los bancos comerciales, sigue en pie.
Sánchez insistió en que elaborará unos Presupuestos "progresistas" pero siempre dentro de las limitaciones que impone la Unión Europea y teniendo como referente la "justicia social".
El Ejecutivo socialista tiene que conseguir los mismos apoyos para aprobar las cuentas públicas que le llevaron al poder en la moción de censura.
(Información de Robert Hetz y Belén Carreño, editado por Tomás Cobos)