BELGRADO/PRISTINA, 28 mayo (Reuters) - Serbia puso el martes a sus fuerzas de seguridad en alerta máxima después de que la policía de la vecina Kosovo llevara a cabo una operación anticontrabando en una región septentrional del país poblada principalmente por serbios.
La intervención, ejecutada en un contexto de creciente tensión, tuvo lugar en cuatro municipios serbios del norte de Kosovo, que sigue estando en gran medida fuera del control de Pristina y promete lealtad a Belgrado.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, reconoció el lunes que Belgrado había perdido el control sobre Kosovo, su antigua provincia meridional, pero advirtió que reaccionaría si Kosovo atacaba a los serbios allí.
En la operación kosovar del martes la policía detuvo a varias decenas de agentes, entre los cuales se cuentan varios serbios, acusados de contrabando de mercancías en el país. Dijeron que la policía se había enfrentado a una "resistencia armada" y que un policía resultó herido. La televisión estatal serbia RTS TV informó de que dos serbios también resultaron heridos durante la acción policial.
Belgrado vio la acción como un intento de las autoridades de Pristina de tomar el control de las regiones septentrionales de Kosovo que limitan con Serbia. En respuesta, la primera ministra serbia, Ana Brnabic, puso en alerta a grupos de operaciones especiales de la policía.
Aunque Kosovo declaró su independencia en 2008, Serbia, que en virtud de su Constitución considera que Kosovo es parte integrante de su territorio, ha estado impidiendo sistemáticamente su ingreso en instituciones internacionales como la Interpol y la UNESCO. También proporciona ayuda financiera a los serbios de Kosovo.
El contrabando en la zona es generalizado y ha aumentado aún más desde que Kosovo introdujo en noviembre pasado aranceles del 100 por ciento sobre los productos procedentes de Serbia.
(Información de Fatos Bytyci desde Pristina y de Aleksandar Vasovic desde Belgrado; Traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdynia)